Groenewegen repite triunfo en el Tour

AFP.- Un último esprint antes del infierno. Dylan Groenewegen logró este sábado su segundo éxito en dos días, en la octava etapa del Tour de Francia, en la víspera de una jornada clave en la que se disputarán quince sectores de adoquines (21,7 kilómetros).

De Chris Froome, defensor del título, a Romain Bardet, la gran esperanza francesa, todos los candidatos al podio tienen marcada la cita del domingo. La meta estará en Roubaix y se llegará unos minutos antes de que comience en Moscú la final de la Copa del Mundo de fútbol (15h00 GMT). Servirá como examen de sus opciones antes de la jornada de descanso del lunes.

Con una frase, Bardet resume la situación: «No tengo miedo del pavé, pero aprendes a temerlo porque sabes que se puede perder todo en esta etapa».

«Que se abra una brecha con los de delante, una caída… O puedes estar bloqueado y se puede complicar rápidamente», añade el francés, que nunca ha competido en la París-Roubaix, de la que los 12 últimos tramos de la etapa del domingo recuperan buena parte del recorrido.

Como la mayor parte de los candidatos al maillot amarillo, a excepción del galés Geraint Thomas (séptimo en 2014). En cuanto a Froome, participó una vez en la ‘reina de las clásicas’, al principio de su carrera (abandono en 2008).

¿Serán importantes las diferencias en esta ocasión? En 2014 el italiano Vincenzo Nibali, futuro vencedor de esa edición, tomó una considerable ventaja con un número de virtuosismo en los adoquines deslizantes por una meteorología inclemente.

Llegará como líder a esta etapa decisiva, con 156,5 kilómetros entre Arras y Roubaix, el belga Greg Van Avermaet (BMC).

Antes, este sábado, Groenewegen (Lotto NL) se impuso con claridad por delante del alemán André Greipel y del colombiano Fernando Gaviria, quienes mantuvieron una peligrosa lucha cerca de las vallas.

Descalificación de Gaviria 

Ambos ciclistas, segundo y tercero, fueron descalificados por el jurado de comisarios debido a que hicieron un esprint irregular. Según las imágenes de televisión, Greipel cerró el paso a Gaviria. El colombiano replicó golpeándole con la cabeza para intentar pasar.

Debido a sus sanciones Peter Sagan consiguió la segunda plaza, por tercera vez en ocho días. El campeón del mundo además cuenta dos victorias y es una amenaza el domingo, como flamante vencedor de la última París-Roubaix.

Precisamente el eslovaco había lanzado el esprint desde lejos, pero después fue neutralizado y superado.

Una caída masiva, a 17 kilómetros de la llegada, cortó el pelotón y perjudicó especialmente al irlandés Dan Martin. El ganador de la 6ª etapa en el Muro de Bretaña, con el codo izquierdo ensangrentado, cedió en torno a 1 minuto y 15 segundos.

Groenewegen, de 25 años, se anotó por tercera vez un triunfo de etapa en el Tour de Francia, su segunda victoria este año tras su éxito el viernes en Chartres. El pasado año ganó la etapa de los Campos Elíseos en París, conclusión del Tour 2017.

El holandés, que pasó al campo profesional en 2015, cuenta ahora con 32 victorias en su palmarés, once de ellas esta temporada.

Foto cortesía: AFP.

Fernando Gaviria estrena el Tour de France

EFE.- El colombiano Fernando Gaviria (Quick Step) se estrenó por todo lo alto en el Tour de Francia con la primera victoria y el maillot amarillo en la jornada inaugural, disputada entre Noirmoutier-En-L’Île y Fontenay-Le-Comte, de 201 kilómetros, en la que Chris Froome perdió 51 segundos por una caída y Nairo Quintana 1:12 minutos debido a un pinchazo.

Gloria para Gaviria, de 23 años, el «Misil» de la Ceja (Antioquía), con victoria en su debut. Se mostró implacable, rematando la faena del Quick Step y demostrando que ahora puede ser el mejor esprinter del pelotón. El doble campeón mundial en pista firmó también la octava victoria de la temporada.

En una jornada tranquila al principio, los acontecimientos se precipitaron en los últimos 5 kilómetros. Mientras Gaviria superaba en el pulso de velocistas al eslovaco Peter Sagan (Bora) -campeón mundial- y al alemán Marcel Kittel (Katusha), por detrás se vivía el desastre para varios favoritos. Froome se dejó 51 segundos por una caída, lo mismo que Adam Yates (Mitchelton) y Richie Porte (BMC), y Nairo Quintana(Movistar) 1:12 minutos por un pinchazo.

Una manera inesperada y caótica de empezar el Tour para varios corredores de la alta jerarquía. Un infortunio en una etapa que se estaba desarrollando con normalidad. «Un desastre», decía Landa en meta, aunque el español llegó en el grupo delantero.

Gaviria ya disfrutaba su sueño mientras los ojos buscaban a Froome y compañía. El colombiano, 4 etapas del Giro y maillot por puntos en su debut de 2017, estaba nervioso por su debut, pero a la hora de lanzarse al esprint se le vio muy desenvuelto.

Pasó a la historia. Es la primera vez que un ciclista gana en su etapa debut desde que el suizo Fabian Cancellara lo hiciera en el prólogo de Lieja en 2004 y es el segundo colombiano en vestir el maillot amarillo, honor que sólo ha tenido un compatriota Víctor Hugo Peña en 2003. Además es la decimoséptima victoria del país cafetero en el Tour.

El «chupinazo» al Tour 2018 se dio en una isla por octava vez en la historia, en un escenario donde se entremezcla de manera caprichosa la tierra y el mar, ambas unidas por un puente o por el Paso de Gois, una carretera que aparece y desaparece a criterio de la marea de aquella zona del Atlántico.

San Fermín presente en el Movistar navarro, con el pañuelo rojo en el cuello de cada uno de sus corredores, expectación en torno al autobús del discutido Chris, con pitos y aplausos del público, y La Marsellesa para lanzar la carrera rumbo al continente. Los campeones nacionales, el de Europa, Kristoff, y el del Mundo, Peter Sagan al frente.

Era día para protagonismo francés y de los jóvenes de la Vandée, por eso se lanzaron de inicio hacia la carretera que se ciñe a la costa tres valientes, Kevin Ledanois (Fortuneo), campeón del Mundo sub’23 e hijo del director de su escuadra, Jérôme Cousin (Direct Energie), conjunto de la región y Yoann Offredo (Wanty).

Una fuga estabilizada en torno a los 3 minutos por los equipos interesados en el esprint. El Quick Step puso a tirar al «Tractor», un chico de 1,90 metros de alzada y 78 kilos de peso. Le relevó Jay Robert Thomson, un surafricano dos veces campeón de África contrarreloj, un soñador capaz de conectar mover al grupo a ritmo endiablado.

Con este decorado resultó imposible cambiar el guión de los velocistas. Asumida la cruda realidad restaba el aliciente de gestionar el primer maillot de la montaña. Se decidió en la Cota de Vix (4ª), donde Ledanois sumó el punto en disputa. Suficiente para subir al podio a enfundarse la prenda de puntos rojos.

El trabajo del Quick Step de Gaviria y del Dimension Data de Cavendish se alargó hasta meta. La maquinaria del equipo belga asfixió al grupo y creó tensión. Llegó el caos, cayeron Froome y Egan Bernal. Se produjo un corte y el campeón del Tour quedó condenado a perseguir junto a Michal Kwiatkowski y Luke Rowe, pero no pudieron impedir recibir el primer mordisco del Tour.

Aún peor le fue a Nairo Quintana. Un pinchazo dejó clavado al boyacense con el pelotón lanzado. Las asistencias no fueron precisamente muy rápidas y el líder del Movistar lamentó su infortunio. «Así son las cosas, es un consuelo que Froome también haya perdido tiempo, pero hay que recuperar».

De la tranquilidad y la emoción del estreno del Tour al caos y las pérdidas de tiempo de los ilustres. El Tour es el Tour. Hasta el último metro.

Mañana se disputa la segunda etapa, entre Mouilleron-Saint-Germain y La Roche-Sur-Yon, de 182,5 kilómetros.

Foto cortesía: AP.