Los Kansas City Chiefs conquistaron el Super Bowl LIV

Luis Alvarado De Sousa (Caracas).- Luego de cincuenta años, los Chiefs de Kansas City conquistaron el Super Bowl LIV ante los 49ers de San Francisco con marcador final de 31-20. El Hard Rock Stadium de Miami fue el escenario designado para el show del «football» con el protagonismo de Patrick Mahomes II para el equipo de Misuri. En los minutos finales, los Chiefs lograron remontar una desventaja de diez puntos para llevarse la corona. Una tendencia que mantuvieron durante toda la postemporada. En el último cuarto, Kansas City anotó dos touchdowns para voltear el marcador ante la incrédula mirada del QB de San Francisco, Jimmy Garoppolo.

Partida y despegue

Los de la bahía se habían adelantado en el primer cuarto gracias a un gol de campo pero con una anotación, los Chiefs tomarían rápido la ventaja. Sin embargo, Garoppolo comenzó a mover a la ofensiva de los 49ers para anotar diecisiete puntos entre el segundo y el tercer período. Todo hacía pensar que los 49ers se llevarían el encuentro, pero como sucedió dos años seguidos con los Atalanta Falcos, faltó la estocada final. Entre estos dos cuartos, se llevó a cabo el show del medio tiempo con una presentación conjunta de Jennifer López, Shakira, J-Balvin y Bad Bunny, que representaron a la comunidad latina de Estados Unidos.

Mahomes comenzó a mover las cadenas para los Chiefs y logró una remontada para el recuerdo. Darren Williams acarreó 17 veces para un total de 104 yardas y un TD. 21 puntos para los de Misuri en el último cuarto. El QB de Kansas City lanzó para 286 yardas y se convirtió en el jugador más joven en ganar el MVP de la NFL, así como el más nóvel en ganar un Super Tazón.

Foto: AS.

El Inter ganó con doblete de Lukaku

AS.- Después de tres empates seguidos, el Inter volvió a celebrar un triunfo en el estadio del Udinese, gracias a dos goles de Romelu Lukaku y una actuación defensivamente muy sólida. Con Lautaro sancionado, Antonio Conte decidió apostar al lado del belga por Sebastiano Esposito, que sigue mostrando enorme personalidad a pesar de sus 17 años. En el mediocampo salieron de inicio todos los nuevos fichajes, Young, Moses y Eriksen: el danés, en su estreno en la Serie A, comenzó con personalidad y en el arranque del partido buscó el gol con un disparo desde lejos que bloqueó Musso.

La primera parte no regaló muchas emociones debido al cerrado 3-5-2 del conjunto de Gotti, que también sabía crear peligro con los contragolpes: todas sus jugadas nacían de los pies de De Paul, cada vez más comodo como mediocentro.

El muro bianconero mostró síntomas de desgaste nada más comenzar la segunda parte, cuando Esposito desperdició un balón que le entregó Musso con un disparo demasiado débil. Conte, poco después, quitó al joven punta y a un Eriksen ya sin energías, sustituidos por Alexis y Brozovic. La llegada del chileno sacudió el partido y el gol llegó cinco minutos después: Barella, en el límite del área, prolongó el balón para Lukaku, cuyo zurdazo raso se coló entre las piernas de Nuytinck y en la portería.

El guardameta Musso, en el 71’, tumbó al endemoniado Alexis en el corazón del área causando un penalti claro, que lanzó y realizó el mismo Lukaku: el belga, con este doblete, alcanza ya los 20 goles en la temporada, de los cuales 16 llegaron en la Serie A.

En el último tramo del enfrentamiento hubo un intento de reacción de los friulani, que solo llegaron a rozar el 2-1 con una volea de Lasagna: Conte celebró a su manera una victoria que le mantiene a tres puntos de la cima de la tabla. Ganar era fundamental para empezar sin agobios una semana calentísima: el domingo le toca Derbi della Madonnina.

Foto: AS.

Ansu Fati lideró el triunfo del Barcelona

AS.- El Barça de Setién es un adolescente que está en un proceso de crecimiento que se podría resumir en el rendimiento de Ansu Fati, otro proyecto tan incontrolable como prometedor, que decidió el duelo ante el Levante con dos goles para que el Barça ganara por 2-1 y siga la estela del Real Madrid en un partido que tuvo de todo. Una primera parte para entusiasmarse y una segunda en la que los blaugrana volvieron a perder el control de un partido que tenían sentenciado y se encomendaron a su portero para acabar pidiendo la hora.

Después de la victoria del Madrid ante el Atlético al Barça le quedaban tres opciones en su partido contra el Levante: ganar al estilo de toda la temporada en plan patada a seguir, fracasar o bien ganar convenciendo de que la apuesta de Setién tiene recorrido. Todo se quedó a medias. Están en el camino, pero falta cocción. Como en la adolescencia.

A fuerza de experimentar el sistema de ensayo-error, Setién parece que va dando con la tecla que no es ni más ni menos que una versión ambiciosa del concepto anterior. Ante el Levante no es que mantuviera la defensa de cuatro olvidando lo de los tres centrales, sino que incluso apostó en defensa por un doble pivote en defensa con Rakitic apoyando a Busquets para capar cualquier intento del Levante de salir a la contra.

Asentado el centro del campo y la retaguardia, el resto era cosa de Messi, que tuvo media hora de escándalo. Desbordó en la banda, creó en el centro y remató, sin suerte, en punta. Y además, ha encontrado en Ansu Fati un socio. Que no es poca cosa. Para ser socio de Messi no basta con ser sensacional, hay que tener ese intangible que hace que Su Majestad te bendiga. Y ahí está Ansu Fati. Probablemente, Ansu no es el mejor jugador que ha jugado con Leo, como no lo era Pedro, pero despunta un brote que ilusiona.

Con un Barça intenso en la presión y bien ordenado en el repliegue, la primera parte fue estupenda para los de Setién, que únicamente echaron en falta colmillo en el área para matar el partido. Griezmann se movía y llegaba con claridad, pero falló de cara a puerta ante las internadas de un Semedo desatado que incluso disparó al travesaño en una de las mejores primeras partes que se le recuerdan de blaugrana.

De la mano de Semedo, de Griezmann y, especialmente, de Ansu, el Barça recuperó la verticalidad con un Messi ejerciendo de quarterback y repartiendo pases que el joven extremo de 17 años aprovechó para marcar dos goles en dos minutos cuando se superaba la media hora de partido.

Con el partido perfectamente encarrilado, le quedaba al Barcelona aprobar la asignatura de defenderse con el balón, matar el partido y no dejar que el Levante le creara dudas. Esa materia que disgustó a Setién en ciertos pasajes del partido contra el Leganés el jueves pasado. Y volvió a suspender.

A base de paciencia, el Barça quiso dominar el partido esperando a que la pelota llegara a Ansu o Messi para dar el picotazo definitivo ante un Levante que tuvo la oportunidad de acortar distancias en un momento en el que el Barça se fue del partido tras un saque neutral. Rochina, con todo a favor envió la pelota a las nubes.

A partir de ahí, el Levante vio que el Barça era débil atrás y Ter Stegen se tuvo que lucir ante Morales. Los blaugrana no lograban dormir el duelo y el equipo blaugrana volvía a fiar su suerte al portero alemán, que en el minuto 66 evitó el gol de Hernani. Para entonces, Piqué ya había visto la amarilla que daba la sensación de estar buscando desde el inicio del partido.

Para tratar de asentar el juego blaugrana entró Sergi Roberto por Griezmann y Arthur por De Jong mientras el equipo local, Messi se obsesionaba con anotar y Ansu por completar el triplete, mientras que los de Paco López no se rendían y seguían poniendo a prueba al guardameta alemán, que tenía más trabajo que Aitor.

Fue incapaz el Barcelona de mantener su portería a cero ante el asedio de los visitantes y Rochina, en el descuento puso el susto en el cuerpo de los culés al marcar desde la frontal el gol que se merecía un Levante valiente que acabó por hacer sufrir a un Barça que sigue creciendo como el adolescente Ansu, al que se aferró para seguir persiguiendo al Madrid.

Foto: Reuters.

Immobile guió la goleada de la Lazio

AS.- La Lazio está viviendo el mejor inicio de su historia en la Serie A. Tras la goleada (5-1) a la SPAL, los ‘laziale’ suman 49 puntos en 21 jornadas, números que nunca habían tenido a estas alturas. Cuando ganaron su último ‘Scudetto’ en la 1999-00, el entonces equipo de Sven-Göran Eriksson llevaba 43. El conjunto de Simone Inzaghi está luchando con los mejores (están a cinco puntos de la Juventus con un partido menos) impulsado por un Ciro Immobile en plena racha.

El delantero italiano tiñó su bota aún más de oro ante la SPAL. Con su doblete alcanzó los 25 goles en 21 partidos. Es el ‘capocannoniere’ con seis tantos de ventaja sobre un Cristiano Ronaldo (19) con el que está rivalizando en esta Serie A. Si CR7 lleva 9 goles en cinco jornadas en 2020, el ex del Sevilla acumula ocho. El luso ha subido el ritmo sin que el italiano lo haya bajado. En la historia de la Serie A, sólo Antonio Valentín Angelillo (1959, Inter) celebró 25 dianas después de 21 partidos de Liga.

Immobile lo ha hecho acechando los 29 tantos que logró en toda la Seria A 2017-18, en la que fue ‘pichichi’ junto a Icardi (Inter) logrando su mejor marca liguera hasta la fecha, y los 36 de Higuaín con el Nápoles en la 2015-16, récord absoluto en un curso en el ‘calcio’. El ‘bomber’ italiano, Bota de Oro con tres tantos más que Lewandowski (22 con el Bayern) va a por todas las marcas con Caicedo como mejor socio.

El ecuatoriano celebró también un doblete y Adekanye cerró una goleada que maquilló Missiroli y que prolonga la racha de una Lazio que lleva 16 partidos invicta, en los que han sumado 13 victorias y tres empates. Su racha de 11 triunfos seguidos terminó en el derbi… pero no su buen curso. Una temporada olímpica con la que sueñan con el ‘Scudetto’.

Foto: AS.

El Tottenham liquidó al City

AS.- A Guardiola se le torció el gesto cuando Lloris detuvo un penalti, empezó a asustarse cuando Zinchenko fue expulsado nada más regresar del descanso y pasó a estar hundido, definitivamente, cuando Bergwijn decidió conectar una volea maravillosa en el día de su debut. Fantástico encuentro de los de José Mourinho, que no lo están pasando bien sin Harry Kane y que ahora, con este resultado, consiguen encadenar dos victorias consecutivas tras cuatro jornadas sin lograr un triunfo. El City se queda por tanto a 22 puntos del líder y el Tottenham, que venía de una temporada desastrosa, quinto a solo cuatro puntos de la zona Champions.

Todo ello tras un partido que recordó a los Mourinho-Guardiola de toda la vida, aunque con algunos matices. El equipo del ex del Barcelona dominando la posesión, creando alguna buena ocasión como la que Agüero envió al palo en la primera mitad, y el conjunto del portugués aprovechando la velocidad y el contraataque para sacar ventaja de los descosidos que pudiese tener la defensa de su rival. Bergwijn, que debutó hoy de la mejor forma posible no solo por el gol, demostró que cuando esté adaptado puede ser un futbolista fantástico para el subcampeón de Europa.

Todo ello hasta la jugada que dominará la semana en Inglaterra y que supone dinamita pura para los detractores del VAR. Tras una entrada de Aurier sobre el ‘Kun’ que dejó al argentino doliéndose dentro del área, los colegiados al mando de la tecnología de videoarbitraje tardaron siete minutos en conceder la pena máxima a los citizensGuardiola, irónico, se señalaba al reloj mirando al asistente, mientras que Mourinho, arrebujado en su butaca, se reía con no menos sorna.

Polémica

La polémica, sin embargo, no acabó ahí, sino que Lloris, que no tenía ni un solo pie remotamente cerca de la línea de gol, consiguió detenerle a Gündogan su disparo desde los once metros. Sterling se lanzó entonces a por la pelota, el meta francés intentó arrebatársela y el inglés cayó al suelo. Tángana, empujones, malas palabras y mucha sangre caliente sobre el césped del Nuevo White Hart Lane, pero no un nuevo penalti. Mou pidió airadamente la segunda tarjeta amarilla para Sterling por fingir, ya que la había visto antes por una entrada criminal sobre el tobillo de Dele Alli que debió ser tarjeta roja, pero ni eso le concedieron.

Pero sí que lo hicieron nada más reanudarse el partido, cuando una entrada de Zinchenko para intentar frenar un contraataque resultó en la segunda tarjeta para el lateral, que había visto la primera durante la pelea de la primera mitad. Guardiola, muy poco acostumbrado a verse en inferioridad numérica, ni siquiera tuvo tiempo para reaccionar, pues Bergwijn marcó su gol poco después.

La expulsión desequilibró el encuentro y Son, aprovechando su velocidad y una muy buena definición al palo derecho de Ederson, hizo el segundo y definitivo tanto que deja al Manchester City a un mundo de distancia del Liverpool.

Foto: AS.

Astronautas de Chiquirí blanquearon a los Vaqueros de Montería

MLB.- Un sencillo empujador de Rodrigo Vigil fue lo único que necesitó un brillante pitcheo de los Astronautas de Chiquirí (Panamá) para vencer por 1-0 a los Vaqueros de Montería (Colombia) en la segunda jornada de la 62 Serie del Caribe el domingo en el Estadio Hiram Bithorn.

Ahora Panamá ha anivelado su récord en el torneo a 1-1, mientras que Colombia, debutante en la Serie del Caribe, cayó a 0-2 y aún no gana el primer juego del evento la historia del país.

El abridor veterano Davis Romero brilló al tirar 7.2 ceros por los panameños. El zurdo, quien militó con los Azulejos de Toronto hace 14 años, permitió un solo hit y otorgó dos bases por bolas, ponchando a dos bateadores.

La única vuelta del partido se produjo en el cuarto episodio, cuando Vigil empujó al dominicano Andy Vásquez con un batazo por el medio del terreno frente al abridor de los Vaqueros, Pedro Echemendía, que pasó de hit al jardín central.

Después de Romero, lanzador ganador del partido, el derecho Diego Moreno cubrió el último inning y un tercero en blanco para adjudicarse el salvamento. Echemendía, al permitir una anotación en 4.2 capítulos, cargó con la derrota.

Colombia, contra la pared, jugará el lunes a segunda hora contra la República Dominicana (Toros del Este), a la vez que Panamá se medirá con México (Tomateros de Culiacán) en el primer choque de la jornada.

Foto: MLB.

Leonard y Butler brillan en los triunfos de los Clippers y Miami

AFP.- Los estelares Kawhi Leonard y Jimmy Butler tuvieron una jornada este sábado con joya ofensiva en la NBA para guiar por el camino del triunfo a Los Angeles Clippers y los Miami Heat, respectivamente.

Leonard se desbordó con 31 puntos para que los Clippers vencieran 118-106 a los Minnesota Timberwolves. Este fue el noveno juego de Leonard con al menos 30 tantos.

El estelar canastero derrotó así al dominicano Karl-Anthony Towns, quien respondió con 32 cartones y 12 rebotes para los Wolves, su cuarto encuentro consecutivo con 30 o más unidades, pero no fue suficiente para evitar que Minnesota perdiera su undécimo desafío seguido.

El también estelar Paul George agregó 21 puntos en 26 minutos y Lou Williams terminó con 17 por el quinteto angelino, que ha ganado siete de los últimos nueve partidos. El banquillo de los Clippers superó a las reservas de los Wolves, 46-33.

Butler también brilla 

Por su parte, Butler también sobresalió en grande con 24 puntos y sus Miami Heat doblegaron a los Orlando Magic 102-89.

El novato Tyler Herro secundó a Butler en la ofensiva con 23 tantos saliendo de la banca, seguido de Meyers Leonard con 18 tantos y la friolera de 14 rebotes.

Por los Magic destacaron Aaron Gordon, con 24 tantos, y el suizo Nikola Vucevic, con 21 tantos y nueve capturas.

En Washington, los locales Wizards sometieron 113-107 a los Brooklyn Nets con 34 puntos de Bradley Beal.

El canastero Thomas Bryant agregó al triunfo 17 puntos y 10 rebotes, mientras que los Nets perdieron a su astro Kyrie Irving por una lesión en la rodilla derecha en el último cuarto.

Irving apenas anotó en esta jornada 11 puntos, su punto más bajo de la temporada, una noche después de anotar su mejor actuación de la campaña con 54 tantos.

Spencer Dinwiddie, quien anotó 12 puntos consecutivos para Brooklyn a fines del tercer cuarto y principios del cuarto, lideró a los Nets con 26 puntos.

Otros resultados

New York Knicks a Indiana Pacers 92-85, Golden State Warriors a Cleveland Cavaliers 131-112 y Dallas Mavericks a Atlanta Hawks 123-100..

Mahomes y los Chiefs apuntan al fin de la sequía en el Super Bowl

AFP.- Han pasado 50 años desde que los Kansas City Chiefs aparecieron por última vez en el Super Bowl, y su mariscal de campo Patrick Mahomes está decidido a asegurarse que valió la pena la espera.

El ‘quarterback’ de los Chiefs buscará su primer título de la final de la Liga Nacional de Football americano (NFL) el domingo contra los San Francisco 49ers en el Hard Rock Stadium, en Miami.

El evento más grande en el calendario deportivo de Estados Unidos promete ser una batalla clásica de estilos, con Mahomes y los Chiefs tratando de superar la defensa de los 49ers cuando cae el telón de la temporada de la NFL.

Por otro lado, los Chiefs tendrán una ardua tarea intentando contener una ofensiva multifacética de los 49ers, que es sumamente efectiva si ataca por el aire o si lo hace por tierra.

Para el mariscal de campo de los 49ers, Jimmy Garoppolo, es una oportunidad de jugar y ganar un título en su tercer viaje al Super Bowl.

Garoppolo fue el respaldo de Tom Brady en los Super Bowls de 2015 y 2017, ambos ganados por los New England Patriots, antes de ser intercambiado a San Francisco.

Pero las esperanzas de Garoppolo pueden depender de cuán exitosamente la defensa de los 49ers, liderada por el novato Nick Bosa, pueda frustrar a Mahomes.

Es un enigma que el coordinador defensivo de San Francisco, Robert Saleh, ha pasado las últimas dos semanas tratando de desentrañar.

Superestrella en todos los sentidos

«Es una superestrella en todos los sentidos que puedas imaginar y será difícil lidiar con él», dijo Saleh esta semana cuando se le preguntó sobre lo que significa Mahomes.

El mariscal de campo de Kansas City ha electrificado la Liga en las últimas tres temporadas con su movilidad, potencia de brazo y gran variedad de pases.

Pero también tiene diversas armas receptoras a su disposición, con el ritmo vertiginoso de Tyreek Hill y Sammy Watkins complementado por la presencia dinámica del ala cerrada Travis Kelce.

En ninguna parte fue más evidente la capacidad de los Chiefs para producir explosiones ofensivas como en su ronda divisional contra Houston.

Con el marcador adverso 24-0 en el segundo cuarto, Mahomes lideró una remontada que terminó en una victoria 51-31.

Mahomes, de 24 años, sería el segundo mariscal de campo más joven en ganar un Super Bowl de obtener la victoria el domingo en la casa de los Miami Dolphins.

«Voy a salir y tratar de divertirme y jugar como he jugado durante toda la temporada», dijo el joven texano a los periodistas. «Es una oportunidad única en la vida que espero tener muchas veces más. Es temprano en mi carrera y estoy emocionado de salir con mis hermanos y tratar de ganar».

¿Uno para ‘Big Red’?

Una victoria para Kansas City también sería la gloria suprema de la larga carrera del entrenador en jefe del equipo, Andy Reid.

Una figura popular conocida cariñosamente entre sus jugadores como «Big Red», Reid, de 61 años, nunca ha ganado un Super Bowl.

«Ha tenido una carrera increíble», dijo Mahomes esta semana. «Obviamente, queremos ganar este juego, el grande, para que lo ponga en su palmarés».

«En este momento estoy concentrado en darles la mejor oportunidad de ganar un Super Bowl», dijo Reid.

Sin embargo, el entrenador en jefe de los 49ers, Kyle Shanahan, es más que capaz de alterar ese cuento de hadas.

Shanahan, de 40 años, es una de las mentes ofensivas más creativas de la NFL, capaz de deshacer cualquier defensa con un libro de jugadas rebosante de inventos.

Y el entrenador en jefe de los 49ers puede sentir que tiene un punto que demostrar después de la pesadilla del Super Bowl de 2017.

Shanahan fue el coordinador ofensivo de los Atlanta Hawks cuando desperdiciaron una ventaja de 28-3 en el tercer cuarto para perder en tiempo extra contra los Patriots.

Sin embargo, su talento como entrenador es innegable. Esta temporada, Shanahan ha supervisado un renacimiento de los 49ers que transformó al equipo de un récord de 4-12 en 2018 a una imponente potencia de 13-3.

Shanahan dice que ha usado el amargo recuerdo de la derrota del Super Bowl de 2017 como un grito de guerra para su joven equipo.

«Estoy como, chicos, no se preocupen, he estado allí ¿Y adivinen qué? Todavía estaba vivo al día siguiente, y mi vida siguió adelante, y las cosas todavía están bien», dijo Shanahan. «Pero ya sea que ganes o pierdas, la clave es que no dudes en nada para que el resto de tu vida puedas mirarte al espejo y no te arrepientas».

Foto: PrimeroyDiez.

La Roma cayó estrepitosamente ante el Sassuolo

AS.- La Roma ha frenado: tras haber conseguido solo cuatro puntos en las últimas cuatro jornadas, los giallorossi cayeron en el campo del espectacular Sassuolo de De Zerbi que, cuando le salen las cosas, se hace imparable. Un resultado que pone en peligro el cuarto puesto del conjunto romano, que mañana el Atalanta podría arrebatarle ganando al Genoa.

El partido se complicó enseguida para los de Fonseca, que encajaron el 1-0 tras apenas siete minutos, cuando Caputo se deshizo de Mancini y superó a Pau López con un preciso derechazo cruzado. El punta italiano apagó el intento de reacción giallorosso con el 2-0, que firmó culminando un gran contragolpe armado por Berardi y Toljan.

Antes del descanso llegó también el 3-0: Berardi, otra vez él, encontró en el área a Djuricic, que no desperdició el mano a mano. Los capitalinos intentaron arreglar el desastre en la segunda parte y dieron la sensación de poder conseguirlo: Dzeko, en su primer partido como capitán tras la marcha de Florenzi, firmó con un testarazo su tanto número 100 a pase de Pellegrini, que poco después fue expulsado por parar con las malas otro contragolpe de Berardi. A pesar de la inferioridad numérica, la Roma también marcó el 3-2: Boga tocó con la mano un centro de Bruno Peres y Veretout, desde los 11 metros, no falló.

En el mejor momento de los romanisti, a un paso de una increíble remontada, llegó otro mazazo: Boga penetró desde la izquierda, se encaró con Mancini y con una maravillosa rosca zurda solventó definitivamente el trámite. Hubo más ocasiones, pero el marcador no volvió a moverse: el Sassuolo celebró un triunfo prestigioso que le aleja de las zonas peligrosas de la clasificación, la Roma confirmó estar lejos de su mejor momento.

Foto: AS.

El Mallorca pierde en casa contra el Real Valladolid

Prensa Mallorca.- Un gol de Ünal en la segunda parte da los tres puntos al Real Valladolid. Un partido sin muchas ocasiones en lo que ha sido la primera derrota del año para el RCD Mallorca en Son Moix (0-1).

Vicente Moreno ha realizado dos cambios en el once respecto a la derrota en el Reale Arena. Han entrado Salva Sevilla por Aleix Febas, después de la baja por enfermedad la semana pasada, y Joan Sastre sustituyendo a Fran Gámez en el lateral derecho. Un once muy reconocible en los últimos partidos por el técnico bermellón.

Ha sido el RCD Mallorca el que ha entrado mejor al partido realizando buenas triangulaciones con Baba como hombre brújula, pero el Real Valladolid es el que ha inquietado primero al portero contrario. Un cabezazo de Ünal que ha detenido Manolo Reina en dos tiempos.A partir de ahí los de Pucela han dominado el juego y se han acercado, sin peligro real, al área bermellona.

En el minuto 28 ha llegado la jugada polémica de la primera parte. Un gol bien anulado a Dani Rodríguez debido a que, en la jugada del gol, el balón había salido completamente por línea de fondo. No ha gustado al cuerpo técnico de Vicente Moreno cómo se ha gestionado la jugada. La decisión del VAR y dejando que el Valladolid sacase rápido mientras los locales aún celebraban el gol y no estuvieran preparados. Tras las protestas, el segundo entrenador del Real Mallorca, Dani Pendín, ha sido expulsado.

Después, el balón no ha tenido un dominador claro. Muchos acercamientos por parte de ambos equipos, pero las de mayor peligro en las botas de los jugadores bermellones. El Cucho Hernández y Dani Rodríguez lo han intentado desde fuera del área sin encontrar portería. Con pocas ocasiones claras y con muchas interrupciones se ha llegado al descanso con empate a cero en Son Moix.

La segunda mitad ha arrancado con una ocasión para cada equipo. Sergi Guardiola y Salva Sevilla han sido los encargados de poner a prueba a los porteros, pero sin mucho peligro. En el minuto 49 ha llegado la lesión de Antonio Raíllo. Tras una carrera se ha dolido del tobillo y en su lugar ha entrado el capitán del Real Mallorca, Xisco Campos.

En el minuto 55 el Real Valladolid se ha adelantado en el marcador en una jugada individual de Sergi Guardiola por banda y, con un buen centro, Ünal ha rematado de cabeza al fondo de la red. Vicente Moreno ha reaccionado al gol con la entrada de Kubo y Pozo buscando frescura en ataque.

Los locales han empezado a crear peligro sobre la portería de Masip con centros laterales y buenas acciones individuales, tanto de Kubo como de Pozo. En las botas del propio Kubo ha estado el empate después de un buen chut que ha salido muy cerca del palo izquierdo de Masip.

En los siguientes minutos el Real Mallorca ha estado cerca de conseguir el empate con acciones peligrosas pero sin obtener recompensa. Con el 0-1 se ha llegado al final del partido y, a pesar de la insistencia local en los minutos finales, los tres puntos vuelan a Valladolid.

RCD Mallorca: Reina, Lumor, Valjent, Raíllo (49’), Sastre (70’), Baba, Salva Sevilla, Dani Rodríguez (58’), Lago Junior, Cucho Hernández, Ante Budimir

Suplentes: Fabrico, Pedraza, Xisco Campos (49’), Pozo (70’), Take Kubo (58’), Abdón, Febas

Real Valladolid: Masip, Moyano, Kiko Olivas, Salisu, Raúl Carnero, Óscar Plano (87’), Alcaraz, Míchel, Toni Villa (71’), Ünal (90’) y Guardiola

Suplentes: Samu Pérez, Antoñito, Javi Sánchez, Fede San Emeterio (90’), Hervías (71’), Waldo (87’) y Sandro

Goles: Ünal, 0-1 (56’)

Foto: Prensa Mallorca.