AS.- El Nápoles ha vivido este martes la última noche de la era Ancelotti, que se ha cerrado con un triunfo (el primero desde el 23 de octubre) y el pase a los octavos de final de Champions League, conseguido con un contundente 4-0 al Genk firmado por Milik (hat-trick) y Mertens de penalti. La gran actuación no fue suficiente para salvar el destino del exmadridista, que tras el enfrentamiento afirmó sonriente: «No sé si estaré en el próximo partido, pero espero que sí. Nunca pensé en dimitir y no lo haré ahora».
El entrenador había anunciado también una reunión, prevista para este miércoles, con Aurelio De Laurentiis, que sin embargo decidió anticipar su decisión y a las 23:40 de este martes anunció el despido, añadiendo: «Quedan intactas la relaciones de amistad, aprecio y respeto mutuo entre club, el presidente De Laurentiis y Ancelotti». ‘Carletto’ paga la peor crisis azzurra en la Serie A en los últimos 12 años, con apenas 21 puntos cosechados en 15 jornadas, a pesar de un mercado de fichajes con una inversión que superó los 100 millones. El club, para el que clasificarse a la Champions es vital, consideró necesario un cambio y el candidato para ocupar su banquillo es Gennaro Gattuso, que ya aceptó un contrato de 18 meses para sustituir justo a uno de sus maestros. Ancelotti saluda Nápoles sin haber ganado títulos, pero pronto podría comenzar una nueva aventura: suena para el Arsenal.
El entrenador, en ‘Sky Sport’, no había querido comentar los rumores sobre la llegada de Gattuso y había excluído la posibilidad de dimitir: «No supe ni pensé en contactos con otros entrenadores, solo pensamos en el partido».
Sobre el triunfo ante el Genk, Ancelotti declaró: «Ha sido una de las pocas satisfacciones de estos meses, también por nuestra culpa. Demostramos ser competitivos en Europa, unas cualidades que, en cambio, no mostramos en la Serie A»..