El Athletic vence por la mínima al Granada y está a noventa minutos de otra final

Marca-.

El Athletic está un poco más cerca de esa soñada final de Copa tras ganar por la mínima al Granada, después de una gran combinación entre Williams y Muniain, los dos mejores sobre el terreno de juego durante los 90 minutos. Junto a ellos aparece en el podio Rui Silva, el meta visitante, y gracias al que aún siguen con vida los andaluces.

Llegados a este punto se han acabado las rotaciones y las probaturas. Ni porteros de Copa, ni minutos para los menos habituales. Estamos hablando de unas semifinales y la gloria está a la vuelta de la esquina. Garitano y Diego Martínez, como no podía ser de otra forma, sacaron todo lo que tienen en el armario.

Más allá de la brutal puesta escena de San Mamés, con la grada intentando llevar en volandas a los suyos, fue el Granada el que asustó primero. Soldado cruzó fuera por poco un centro de Herrera en el minuto 5. Poco después, el propio Herrera se sacó un disparo envenenado desde la frontal que detuvo Unai Simón con agilidad. Dos sustos que no frenaron el ímpetu local. De repente, los andaluces desaparecieron. O para ser exactos, los leones se vinieron arriba.

Fue media hora de dominio total, de juego veloz por las bandas, de Williams omnipresente y Muniain poniendo sentido a tanta velocidad. Rui Silva tuvo que emplearse a fondo con un par de grandes intervenciones a tiros de Williams y Vesga. También Raúl García y Yuri rozaron el gol. El Granada bastante hacía con intentar mantener la nave a flote y dejar pasar los minutos a ver si escampaba. Es un equipo el de Diego Martínez que destaca por la solvencia defensiva, pero el Athletic estaba avisando demasiadas veces y en una de ellas cogió desprevenida a la zaga nazarí.

Williams, quién si no, ejerció de galgo por la banda y cedió a Muniain para que fusilara a placer. San Mamés se vino abajo, tras pasar la habitual consulta al VAR, que es como echar agua a un fuego. Faltaban tres minutos para el descanso y el gol, validado, parecía medio pasaporte para la eternidad.

El técnico visitante movió ficha en el descanso. Metió a un tercer central, Vallejo, por un centrocampista, Puertas, que andaba tocado. El Athletic cedió metros, como queriendo conservar su tesoro, pero tenía claro que a la mínima iba a matar a la contra. Casi lo logra Williams, poco después Rui Silva hizo la parada de la noche a un trallazo de Capa. Y un minuto después, en el 60, el propio Capa lograba el 2-0… hasta que el VAR se encargó de avisar a Hernández Hernández de un fuera de juego posicional del ‘9’ rojiblanco. Tras la consulta, volvimos al 1-0.

El Athletic no renunciaba a ese segundo tanto que podía medio sentenciar la eliminatoria y el Granada quería, pero no podía, lograr ese tanto fuera de casa que en los duelos a doble partido es tan importante.

El fútbol empezó a dar paso a la dureza. La tensión iba creciendo y el juego, todo lo contrario. Faltas, interrupciones, protestas, amarillas… Faltaba saber quién era el beneficiado del cambio de los acontecimientos sobre el césped.

Mientras, Muniain y Williams seguían a lo suyo, conectando de maravilla y haciendo trabajar de lo lindo a Rui Silva, un jabato bajo palos.

En los últimos 10 minutos pareció tener más cuajo el Athletic. San Mamés insuflaba oxígeno donde las piernas no llegaban y el Granada apenas era capaz de acercarse al área local. Salvo en el minuto 82, cuando Neva se sacó un misil desde fuera del área que Unai Simón despejó a córner con categoría, demostrando que también había portero en el otro lado del campo.

Ni que decir tiene que todo el mundo tenía claro que dentro de tres semanas hay otro partido en Los Cármenes, algo que no ha pasado hasta ahora en todas las rondas precedentes de esta nueva Copa del Rey. El partido estaba vivo, pero aún más la semifinal. Quedan otros 90 minutos, quizás 120 más y eso es mucho para pensar en que esto está visto para sentencia. Ni mucho menos.

Foto: Marca.

Darwin Machís marcó en triunfo del Granada contra el Espanyol

Prensa – Agencia Carabobeña de Noticias 

Granada remontó ante Espanyol 2-1, en juego donde el vinotinto Darwin Machis aportó una diana en la jornada 22 de la en la jornada 22 de la Liga española.

Los goles del partido fueron anotados por Raúl de Tomás (26′ penal), Machis (38′) y sumó para el triunfo Carlos Fernández (46′).

Fue un triunfo que deja a Granada provisionalmente en la décima casilla con 30 puntos, mientras y la alegría de sus seguidores que plenaron el estadio Nuevo Los Cármenes.

Espanyol sigue en crisis, último de la tabla con olor a «formol» con apenas 15 unidades.

Granada remontó ante Espanyol

La escuadra catalana abrió la cuenta a los 26′ por intermedio de Raúl de Tomas, cuando cobró una pena máxima.

El portugués Domingo Duarte cometió la falta dentro del área, aunque el local protestó la sentencia,

Aunque la escuadra «perica» tuvo otro par de ocasiones de aumentar la cuenta, fue Machís el que pudo emparejar al recibir dentro del área un pase de Carlos Fernandez y batir por bajo al portero Diego López.

Otro que destacó fue el volante venezolano Yangel Herrera, quien jugó completo, mientras que su compatriota fue extraído a los 69 minutos.

El tanto que a la postre le dio el triunfa a la oncena andaluzasalió de los pies de Machís, quien robó la esférica al Brasileño Naldo Gomez, gestó con una sensacional jugada asistió a Carlos Fernández para el 2-1 cuando apenas corría 15 segundos del arranque de la etapa complementaria.

Fue el tercer tanto de la temporada para Machís y los tres puntos, además de la asistencia que a la postre le brindó el noveno triunfo a su club.

Foto: Agencia Carabobeña de Noticias

.

El Barcelona venció al Granada en el debut de Quique Setién como entrenador

Prensa Diario Sport

Expectación. Nervios. Ganas. Ilusión. Mucha ilusión. Así se presentaba el socio azulgrana al Camp Nou para ver en directo el debut de Quique Setién en el banquillo del Fútbol Club Barcelona. Las expectativas eran muy altas. La marcha de Valverde y la llegada del cántabro habían dado un soplo de aire fresco a una plantilla y una afición que lo pedía desde hacía meses.

Llegaba el momento de trasladar las sensaciones al terreno de juego. Y allí hubo la primera mini decepción del aficionado azulgrana. Riqui Puig, suplente. Artur, suplente. Rakitic y Arturo Vidal, titulares. Es decir, un once que habría firmado Ernesto Valverde. Comprensible. Setién acaba de aterrizar y necesita tiempo para implantar sus ideas. Sin embargo, ya se pudieron ver algunas bastante significativas. La primera, en la salida de balón. Setién diseñó un 3-5-2 con Sergi Roberto enganchado a los dos centrales, Jordi Alba ocupando todo el carril izquierdo y con Leo Messi y Griezmann con libertad por dentro. Ansu, fijando en la derecha. El conjunto azulgrana la fue ejecutando con la novedad que la salida era por el lateral, no con el pivote como se hacía anteriormente. Con este movimiento, Setién buscaba la asociación de jugadores por dentro. Esa era la clave. Unir el bloque, combinaciones al primer toque y presión intensa tras perdida. En resumen, potenciar la figura de un Busquets que necesita interiores que den circulación al juego. Sufrieron Arturo y Rakitic.

Con estas novedades, el Barça buscó la portería de un Rui Silvaque mostró pocas fisuras. El que más lo inquietó fue Ansu Fati. Con el descaro de un adolescente que entra a la cancha a jugar con los mayores, el canterano desbordó y tuvo varias ocasiones para marcar. Da gusto ver jugadores que aún se atreven a encarar. Le falto acertar en la última decisión. Lo mismo le pasaba a Messi. Muy activo el argentino aunque sin suerte en los metros finales. A destacar Griezmann, con buenos movimientos de fuera para dentro y rápido en la circulación. El Barça terminaba los primeros 45 minutos con más del 80% de posesión. Buen homenaje de Setién a su admirado Cruyff.

RIQUI ILUMINÓ Y MESSI DICTÓ SENTENCIA

En la segunda parte, el Barça se alargó y recordó al de otras jornadas. El equipo se partía y eso lo aprovechó el Granada para acercarse a la portería de un Ter Stegen inédito. Tanto se acercaron que a punto estuvieron de inaugurar el marcador. Eteki la mandó al palo. A Setién no le gustaba lo que veía y movió el banquillo. Era el momento Riqui Puig. El elegido para recuperar el orden en el centro del campo. Ovación para él. El sacrificado, Rakitic. Un segundo antes de su entrada, el colegiado expulsaba a Germán. Rigurosa decisión que dejaba con diez al Granada. Y despertó el Barça. Messi conectaba con Griezmann que se apoyaba bien con Arturo para que el chileno se la dejara al argentino y marcara a placer. Anotaba el Barça. Anotaba Messi. En una jugada marca de la casa del mejor Barça que precedía de un buen robo de Riqui Puig. Estuvo bien el canterano, aportando dinamismo al centro del campo y dejando detalles de mucha calidad. También entró Arthur, en el que debe ser el centro del campo del futuro. Con el resultado a favor, el Barça se limitó a combinar ante un Granada que le penalizó la expulsión. Sensación de mejora, buenas sensaciones y tres puntos en el debut de Quique Setién.

Foto: Diario Sport.