MLB: Tarik Skubal maniató a la ofensiva de Cleveland y Detroit tomó ventaja en la Serie de Comodín  

Tony Cittadino (Madrid).-  Tarik Skubal sacó la chapa como el as de la rotación de los Tigres de Detroit, para guiar la victoria de dos carreras por una ante los Guardianes de Cleveland, en el primer juego de una de las Series de Comodín de la Liga Americana en el Progressive Field.

El juego, respondió a la expectativa. Fue un duelo de pitcheo, que se decidió por los pequeños detalles. Javier Báez fue el más destacado a la ofensiva, de los felinos, al irse de 3-2. Detroit bateó cinco hits, uno menos que Cleveland, que tuvo a Gabriel Arias como su mejor toletero, al ligar de 3-1, con impulsada y ponche.

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Skubal estuvo intraficable para llevarse el triunfo, al lanzar siete innings y dos tercios, en los que permitió tres hits y una carrera, además de regalar tres bases por bolas y ponchar a 14. De esta forma, llegó a 34 abanicados en sus primeras cuatro salidas en la postemporada, de acuerdo a datos de Elias Sports Bureau.

El zurdo, igualó en la lista a Stephen Strasburg y Noah Syndergaard y escolta a Josh Beckett (35), Sandy Koufax (38) y Bob Gibson (41).

Gavin Williams (0-1), cargó con la derrota, a pesar de una buena salida. Trabajó seis entradas completas, permitió cinco hits y dos carreras, todas sucias. Dio un boleto y ponchó a ocho.

De hecho, el derecho había comenzado bien el juego, al retirar los primeros dos outs con dos lanzamientos. Sin embargo, Kerry Carpenter bateó hit a la derecha y avanzó a segunda base por error de fildeo del jardinero derecho Johnathan Rodríguez. Más tarde, avanzó con sencillo a la izquierda de Spencer Torkelson.

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Cleveland empató la pizarra en la baja del cuarto inning, cuando Gabriel Arias pegó dentro del cuadro, pero en la jugada Ángel Martínez, se metió hasta el home y el disparo de Skubal llegó tarde. La jugada fue decretada out, pero los Guardianes pidieron la revisión de la jugada y la decisión fue cambiada a quieto, como se vio claramente en la repetición.

Los locales podían haber roto la paridad, pero Brayan Rocchio quiso sorprender con un toque de bola, pero fue retirado en la inicial, dejando a José Ramírez esperando remolque en la tercera base.

Detroit siguió haciendo las pequeñas cosas y así retomaron la ventaja en el séptimo capítulo. Zach McKinstry se sacrificó con un toque de bola por la inicial, remolcando a Riley Greene.

Cleveland estuvo cerca de igualar las acciones en la novena entrada, pero Will Vest sofocó la rebelión y se apuntó el salvado.

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Ramírez se embasó por rodado al short stop, pero el disparo de Báez a la inicial fue malo, permitiendo que el dominicano llegara a la antesala. Sin embargo, Ramírez fue puesto out al ser sorprendido en un machucón al pitcher de Kyle Manzardo, acabando con cualquier posibilidad de igualar el encuentro.

Este miércoles se disputará el segundo juego de la Serie en el Progressive Field. Detroit buscará una victoria que le lleve a la Serie de División ante los Marineros de Seattle, mientras que Cleveland está obligado a ganar los dos encuentros en su casa.

De acuerdo a MLB, en la historia de las Series de Comodines al mejor de tres, los ganadores del Juego 1 han ganado la serie en 18 de 20 ocasiones (90%), incluyendo 16 barridas. Los equipos que han ganado el Juego 1 como visitantes tienen un récord de 11-2, incluyendo nueve barridas. Las únicas dos remontadas de equipos que perdieron el Juego 1 en casa fueron en el año 2020 (Atléticos vs. Medias Blancas y Padres vs. Cardenales).

Foto: Prensa MLB

MLB: Cleveland selló una remontada memorable y se quedó con el banderín de la División Central de la Americana

Tim Stebbins (MLB).- El 4 de julio, después de que los Guardianes perdieron por octava vez durante su seguidilla de 10 derrotas, los jugadores permanecieron en la cueva del Progressive Field y observaron la celebración de los Tigres.

La temporada de los Guardianes había tocado un nuevo punto bajo, pero Slade Cecconi declaró que podían canalizar esos tiempos difíciles y convertirlos en algo grandioso.

“Tengo muchas ganas de que llegue el final de la temporada, cuando recordemos esta racha de ocho derrotas y digamos: ‘Hombre, ¿recuerdas lo difícil que fue eso?’”, dijo Cecconi esa noche. “¿Recuerdas cómo lo superamos? ¿Recuerdas cómo confiamos el uno en el otro? ¿Recuerdas cómo nos presentamos igual todos los días y simplemente seguimos trabajando?

“Va a dar sus frutos. Vamos a vernos en una gran posición al final de la temporada. Creo plenamente en eso”.

Todo lo que hicieron fue hacer historia en el béisbol. Con la derrota de los Tigres por 4-3 ante los Medias Rojas el domingo, los Guardianes aseguraron el título de la División Central de la Liga Americana por segunda temporada consecutiva y 13ra en la historia de la franquicia, culminando quizás la mayor remontada en la historia del béisbol.

Los Guardianes recibirán a un rival conocido, los Tigres, en el Progressive Field para la Serie del Comodín de la L.A. al mejor de tres que comienza el martes.

Cleveland llegó a estar hasta 15 juegos y medio detrás de Detroit por el primer lugar de la división, tan recientemente como la mañana del 9 de julio. Según el Elias Sports Bureau, ese es el mayor déficit que un equipo ha superado para terminar primero en su división (desde 1969) o liga (antes de 1969). Los Bravos de 1914 (15 juegos atrás) tenían el récord anterior.

Los Guardianes llegaron a estar hasta 11 juegos detrás de Detroit este mes, la mañana del 5 de septiembre. Ese es el mayor déficit de septiembre superado para ganar una división (desde 1969) o liga (antes de 1969), por sobre el déficit de 8 juegos y medio borrado por los Cardenales de 1964. Cleveland ganó 17 de 19 encuentros entre el 5 y el 24 de septiembre.

Los Guardianes se convirtieron el sábado en apenas el cuarto equipo en llegar a la postemporada en una campaña en la que tuvieron una racha de 10 derrotas. Decir que ganar la división era inimaginable es un verdadero eufemismo.

Pero aquellos dentro del clubhouse del Progressive Field nunca se rindieron y mantuvieron la confianza en que podían hacer lo imposible.

“No creo que nadie perdiera la visión de a dónde intentábamos llegar este año», dijo Cecconi el domingo, “ni siquiera en nuestro punto más oscuro de la temporada. De ahí que dijera lo que dije en ese momento. Es realmente genial verlo completarse de esta manera”.