El PSG no pudo con el Napoli

Marca | Foto cortesía: AFP.-

San Paolo devoró al PSG. Como antes hicieron el Allianz Arena, el Bernabéu y Anfield, el conjunto parisino se vino abajo en un gran escenario… aunque se llevó un punto. El fuego del Nápoles quemó a Neymar y Mbappé en un segundo tiempo en el que el equipo de Ancelotti elevó las pulsaciones atropellando con su ritmo frenético a los parisinos. Buffon, acostumbrado tantas veces a viajar al sur de Italia con la Juventus y a hacer milagros bajo el Vesuvio, sujetó con sus guantes al PSG hasta que cometió un penalti que privó a su equipo del triunfo (1-1). Arrolló a Callejón dejando en cuarentena sus tres ‘milagros’. Otro traspiés del PSG lejos de París en Europa. Otra visita difícil de Champions en la que no catan una victoria. Y ya van cuatro consecutivas.

Nápoles tuvo que aguardar 77 minutos para aplaudir a Cavani. El delantero uruguayo, recién salido de una lesión, esperó en el banquillo su turno. Faltó la C de la ‘MCN’ y Neymar y Mbappé jugaron sin su referencia. El PSG quiso anestesiar la pasión del Nápoles y de San Paolo bajando la temperatura y la velocidad de su fútbol. Tuchel jugó con tres centrales y pobló la medular. Un plan que le sirvió en el primer acto, cuando Ospina tocó más balones que Buffon. Mbappé dejó sus carreras habituales y Neymar algunos de sus lujos. Fueron protagonistas. Y cuando conectaron, saltaron chispas.

‘Ney’ encontró a Kylian al espacio y el francés recortó y asistió al español Bernat para que hiciera el 0-1. Un gol al borde del descanso protestado por San Paolo. Mbappé volvió a fabricar un tanto en la Champions y ya son 17 (12 dianas y cinco asistencias) en 18 partidos en la máxima competición continental. El PSG tenía el premio y el liderato del grupo, ahuyentaba sus fantasmas en la Champions lejos del Parque de los Príncipes, pero quedaba la segunda parte de la película.

El Nápoles se transformó en la caseta. El conjunto de Ancelotti arrolló al PSG a base de presión. Buffon frenó a Mertens, Insigne y Fabián con tres manos prodigiosas. Se diluyeron Neymar, Mbappé, Di María… y el ‘Napoli’ se agigantó. Llevaron al límite a los de Tuchel hasta que empataron. Callejón cazó un balón cruzado que rozó Thiago Silva y Buffon le arrolló. Penalti que transformó Insigne equilibrando el combate. El genio napolitano lleva cinco tantos en sus últimos seis partidos de Champions. Está en su salsa.

El Nápoles corrió tanto que tuvo que ‘descansar’. Y el PSG se estrelló en el muro que Koulibaly tejió delante de su área. Hamsik, que se convirtió en el futbolista (512) con más partidos de la historia del ‘Napoli’, fue la sobra de Neymar. El conjunto de Ancelotti supo sufrir y aguantar. El PSG se atascó y ni la entrada de Cavani le reactivó. ‘Ney’ acabó con una amarilla por sus protestas. Mbappé lo tuvo que calmar. Lo intentó de todas las maneras, no se escondió, pero estuvo maniatado por un Nápoles que ha frenado al PSG en casa y fueradejándoles terceros de grupo. San Paolo no hace prisioneros. Respira el Liverpool tras su resbalón en Belgrado. La batalla continúa..

El Barcelona tiene un pie en octavos

Marca | Foto cortesía: AFP.-

El Barcelona ya está en octavos. Mereció ganar cómodamente, pero sólo pudo sacar el punto que le da la clasificación matemática. El conjunto de Valverde, que estrenó su llamativa tercera equipación, escribió una novela rosa en Turín con final feliz a medias. Icardi lo evitó en el minuto 86 en la única ocasión semidecente que tuvieron los italianos en todo el partido. 26 remates hicieron los azulgrana para un solo gol. Injusto, sí, pero el fútbol son goles.

La fuerte presión inicial del Inter que planteó Spalletti duró apenas dos minutos. Los propios jugadores italianos renunciaron a ella ante la imposibilidad de robar el balón a un equipo que a base de toque y toque los sacaba desde la defensa y llegaba con suma facilidad ante la meta de Handanovic. Dembélé, que recuperó la titularidad ante Rafinha, ya dio un aviso al minuto y medio de juego con un disparo de lejos.

Al Inter no le duraba apenas el balón. La anticipación de los jugadores de Valverde a cada pase italiano provocó que las ocasiones se sucedieran ante la meta de Handanovic. Salvo un remate alto de Asamoah, todas las ocasiones hasta el descanso fueron del Barça. Luis Suárez fue protagonista en varias de ellas, se le resiste el gol en Champions y está obsesionado con marcar. El uruguayo, que no logra uno fuera de Barcelona desde hace tres años, dispuso de tres ocasiones claras para el 0-1, pero no tuvo la mira ajustada. El 0-0 del descanso se antojaba muy corto para la superioridad demostrada por los de Valverde con hasta 13 remates a puerta.

Nada cambió en la segunda parte. Los hombres de rosa fueron dueños y señores del partido ante un Inter que sólo atacaba por la banda de Perisic.Coutinho, por dos veces, y Rakitic fueron los siguientes en probar suerte ante Handanovic pero no había forma. La ocasión del croata fue la más clara en un mano a mano que salvó el meta esloveno.

El Inter no dio señales de nada hasta el minuto 64 con un remate desviado de Politano. Puro espejismo. Al minuto Dembélé también pudo marcar con un disparo potente que casi sorprende al meta interista. Misma suerte que en las anteriores ocasiones La afición del conjunto neroazzurro sólo podía celebrar los córners que forzaban los suyos, hasta ahí llegaban las acometidas locales.

Pasaban los minutos y Valverde movió ficha sacando primero a Arturo Vidal y a falta de 10 hizo debutar a Malcom en la Liga de Campeones. El Barcelona llevaba hasta ese momento 25 remates sin éxito. Pues bien, el primer balón que tocó el brasileño en su debut en Champions acabó en gol con un disparo seco por bajo que acabó con el inmaculado partido de Handanovic.

El Barcelona consiguió lo más difícil y en un momento en el que al Inter no le quedaba muchos minutos para reaccionar. Pero Icardi, desaparecido en todo el partido, recibió un balón y se revolvió en el área como él solo sabe hacer y logró un empate que nadie esperaba ya en Milán. El Barcelona logró su objetivo de estar en octavos, pero necesita una victoria más para ser primero matemáticamente..

Barcelona venció al Inter y el PSG resiste

AFP.- El Barcelona y el Borussia Dortmund encadenaron un tercer triunfo en otros tantos partidos en sus grupos de la Liga de Campeones, destacándose así como líderes en solitario, este miércoles en la tercera jornada, en la que el París Saint-Germain evitó una desastrosa derrota salvando un empate en el descuento ante el Nápoles.

Barça y Dortmund jugaban como locales ante las otras dos formaciones de sus grupos que como ellos habían logrado ganar en las dos primeras jornadas, por lo que se trataba de duelos directos por el control de la situación: el campeón de la Liga española se impuso 2-0 al Inter de Milán y el líder de la liga alemana arrolló 4-0 al Atlético de Madrid.

En el Barcelona, esta victoria tiene una doble lectura positiva: llegó con Lionel Messi lesionado, y como inyección de confianza a cuatro días de recibir al Real Madrid en el gran Clásico español.

AFP / Vincent Lefa

Rafinha, el hombre elegido por Ernesto Valverde para suplir la baja de Messi, abrió el marcador (32), antes de que Jordi Alba pusiera el 2-0 (83) definitivo en un partido, que el astro argentino vio desde la grada del Camp Nou.

Con el brazo en cabestrillo y acompañado de su hijo, Messi no perdió detalle de un encuentro que el Barcelona dominó y que le hace dar un paso de gigante hacia la clasificación para la siguiente fase de la Champions.

«Hemos estado muy bien, según avanzaba el partido, mejor, salvo el inicio de la segunda, pero lo hemos superado», señaló Valverde.

En el grupo B, el Barça tiene un pleno de 9 puntos y deja al Inter como segundo con 6. Los ‘nerazzurri’ tienen todavía una situación cómoda, ya que por detrás están PSV Eindhoven y Tottenham, con apenas uno cada uno, tras su empate 2-2 en Holanda este miércoles.

En Dortmund, el belga Axel Witsel firmó en el minuto 38 el único gol de la primera parte y en la segunda sentenciaron el portugués Raphael Guerreiro (73 y 89) y el inglés Jadon Sancho (84). Fue el revés más duro de la ‘era Simeone’.

En el grupo C, el París Saint-Germain tuvo muchísimos problemas y estuvo a punto de sufrir una derrota muy preocupante, pero el argentino Ángel Di María, con un bello tanto, permitió al campeón francés igualar 2-2 contra el Nápoles.

Por dos veces se adelantó el subcampeón italiano, con dianas de Lorenzo Insigne (23) y del belga Dries Mertens (77). Había igualado en el 61 el PSG con un tanto en contra del portugués Mario Rui, antes de que el ‘Fideo’ Di María pusiera el 2-2 definitivo.

«Visto el esfuerzo realizado por el equipo, habríamos merecido la victoria, pero es así jugar contra el PSG, ellos tienen jugadores de tal calidad que es suficiente un segundo para que marquen un gol», estimó el italiano Carlo Ancelotti, ex del PSG y actual entrenador del Nápoles.

El PSG es tercero de grupo con 4 puntos, uno menos que el Nápoles (5) y dos por detrás del Liverpool (6), que goleó 4-0 al Estrella Roja (1) con tantos del brasileño Roberto Firmino (20), el egipcio Mohamed Salah (45, 61) y el senegalés Sadio Mané (80).

En el grupo D, el Oporto es líder con 7 puntos tras ganar 3-1 al Lokomotiv en Moscú, en un duelo donde marcaron sendos tantos los mexicanos Héctor Herrera y Jesús Corona. Schalke 04 (2º, 5) y Galatasaray (3º, 4) empataron 0-0 en Estambul y siguen en la carrera por los octavos.

Foto cortesía: AFP / Josep Lago.

La Juve vence en Old Trafford con un gol de Dybala

Prensa Juventus.- Los octavos de final de Champions aun no son matemáticos, pero falta poco. La Juve ganó en Old Trafford 22 años después del último triunfo: en 1996 fue con Del Piero y esta vez con otro 10, Paulo Dybala para el 0-1 final. 

Pocos equipos pueden llegar a Old Trafford y jugar con la personalidad de la Juve desde el inicio. Allegri diseñó un 4-3-3 agresivo con Cuadrado, Dybala y Ronaldo mutando posiciones en ataque y confundiendo a los rivales. Tras las primeras llegadas llegó el gol a los 18 minutos: carrera de Ronaldo por la derecha, centro hacia Cuadrado que llega a tocar el balón y la pelota suelta es rematada por Dybala en el área para anotar su cuarto gol europeo de la temporada. 

El gol no apagó a la Signora, que siguió marcando el juego. Cancelo, Bentancur y Ronaldo y Matuidi en una doble ocasión pusieron en peligro a los locales. Un tiro más de Dybala cerró un primer tiempo de dominio absoluto bianconero, pese al único gol de ventaja.

Aunque la segunda parte inició con una nueva ocasión de CR7 salvada por De Gea, la Juve frenó con el paso de los minutos, permitiendo atacar más a los ingleses. Pogba golpeó el palo a la media hora y Allegri reaccionó dando a entrada a Bernardeschi y Barzagli por Dybala y Cuadrado, pasando a defensa de tres. Así, la Juve rechazó los intentos de los ingleses, realizó algún contragolpe y cerró la noche con un triunfo que le permite poner un pie en octavos de final de Champions. 

MANCHESTER UNITED-JUVENTUS 0-1

GOLES: Dybala 17′ pt

MANCHESTER UNITED

De Gea; Young, Smalling, Lindelof, Shaw; Matic, Pogba; Rashford, Mata, Martial; Lukaku
A disposición: Romero, Bailly, Darmian, Fred, Andreas, Ander Herrera, Chong
Entrenador: Mourinho

JUVENTUS
Szczesny; Cancelo (42′ st Douglas Costa), Bonucci, Chiellini, Alex Sandro; Bentancur, Pjanic, Matuidi; Cuadrado (36′ st Barzagli), Ronaldo, Dybala (33′ st Bernardeschi)
A disposición: Perin, De Sciglio, Benatia, Kean
Entrenador: Allegri

ÁRBITRO: Mažić (SRB)
ASISTENTES: Ristić (SRB), Djurdjević (SRB)
CUARTO ÁRBITRO: Petrović (SRB)
JUECES DE ÁREA: Djokić (SRB), Grujić (SRB)

AMONESTADOS: 14′ st Matuidi, 33′ st Young, 38′ st Chiellini

Foto cortesía: Juventus

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El Madrid gana pero no convence

ElPais.- Ni siquiera un rival del camión escoba de la Copa de Europa fue un sedante para este Madrid gripado y extraviado. Los muchachos del Viktoria Pilsen llegaron angustiados ante un posible chaparrón y se vieron a un gol del empate en el tramo final. Mientras, el Madrid fue el Madrid de estos tiempos de zozobra. El gol, por más que genere ocasiones, le supone un hito alpino, y en su área se columpia con cualquiera. Incluso ante el Viktoria Pilsen, que le tuvo en suspense cerca de Keylor en media docena de veces. Y hasta le tuvo acongojado en los últimos minutos. La victoria, pírrica y sin gracia, no despejará el revuelo alrededor de un equipo que padece hasta con un rival que, ya derrotado, dio una vuelta olímpica por el Bernabéu.

Hay hartazgo en Chamartín. También con los devotos de la Copa de Europa, por lo general más complacientes que los adeptos de la Liga. La pitada al descanso fue elocuente. Justo antes, Hrosovsky, un gregario checo, acababa de pifiar un gol que solo podía ser gol, gol o gol. Pero al hombre, reflejo de este limitado Viktoria Pilsen, le dio un ataque de pánico y marró la ocasión a un palmo de la portería, abierta de par en par. Que un adversario tan parvo sumara su tercera oportunidad en medio tiempo perturbó a la grada, airada por tantos chascos recientes.

Que el conjunto checo apurara al Madrid evidenció que el grupo de Lopetegui no está bien atornillado. Ya sea ante el Levante o ante un rival de escala inferior a los granotas como el representante checo. Por supuesto que el Real tuvo trances en el área de Hruska. Solo faltaría. Pero, pese a su descontada superioridad en el área visitante, el Madrid no dio la sensación de tener del todo embridado el partido.

Más o menos apañado con la pelota, el cuadro checo traslucía una extraordinaria blandura defensiva. Un estupendo servicio lateral de Lucas pilló a Hedja desnortado y Benzema cabeceó de maravilla a la red. El tanto del francés dio paso a un trecho de fútbol monserga, ordinario. El Madrid tramitaba el duelo, sin más, mientras que el Viktoria era el Viktoria salvo cuando encontraba a Krmencik, un ariete pértiga con clase con los pies, o el Madrid le consentía ser lo que no es. Limbersky hizo de sonajero para el Madrid. Su picada frente a Keylor se fue por un dedo. Ni ante semejante adversario se veía a un Real cosido.

A tirones, Benzema, activo esta jornada, no tuvo ojos para Bale en un ataque diáfano. Lo mismo que Isco no prestó atención a la soledad de Benzema y Kroos cuando el meta visitante estuvo patoso con los pies y le sirvió en bandeja un gol. Y tampoco tuvo vista un asistente arbitral de portería. En sus morros, Limbersky estuvo torpe al ceder el balón con el pecho a su portero, se anticipó Lucas y el checo le arreó un patadón. Un penalti de libro.

Algo más fluido en la ofensiva, el Madrid multiplicó sus acometidas en el segundo acto. Pero está maldito ante el gol. Cuesta creer que un pegador clásico haya pasado a ser un peso mosca. Sin mucha plasticidad, pero remó por los costados y por el embudo. Sin acierto por una vía u otra. Hasta que encontró respiro con un novato, Fede Valverde, relevo de Isco antes de la hora. El uruguayo se estrenó con tanta soltura que en su primer toque hiló muy bien con Bale, que conectó de forma exquisita con Marcelo con un taconazo terminal que dejó al lateral frente a Hrusca. El 2-0 tampoco espabiló al Madrid, nada categórico en ninguna de las áreas. Se fueron Bale y Benzema, se lesionó Marcelo y el Real, aturdido por el discurrir de la noche y por el discurrir de las últimas semanas, solo encontró alivio cuando el árbitro bajó el telón. Por entonces, el goleado Viktoria que se esperaba buscaba la igualada ante el asombro y el gesto retorcido de la gente. Pocas veces un triunfo habrá resultado tan poco analgésica. Al contrario. El Madrid de las próximas horas seguirá en combustión.

Foto cortesía: Gonzalo Arroyo | Getty Images.

El Inter volvió a remontar y venció al PSV

MARCA.- Los de Milán han vuelto a la Champions por la puerta grande y, tras remontar al Tottenham en la primera jornada en los últimos cinco minutos (del 0-1 de Eriksen se pasó al 1-1 de Icardi en el 85′ y Vecino en el 90′ puso el 2-1), ahora tocó remontar en Eindhoven.

Se pusieron por delante los neerlandeses por medio de un golazo de Rosario pero Nainggolan decidió dejarlo en empate al descanso con un zapatazo marca de la casa. En el 60′, sumó su segundo tanto en la competición Icardi. De nuevo en una remontada. De nuevo para ganar. De hecho, en lo que llevamos de 2018-19, si Mauro Icardi marca, el Inter gana. Los italianos comandan la clasificación junto al Barça con pleno de victorias.

Ahora toca resistir el envite de los de Valverde para poder decir, bien alto, que el Inter ha vuelto a Europa por la puerta grande. De momento, camino van de ello.

Foto cortesía: Movistar+

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Barcelona volvió a la victoria frente al Tottenham en Wembley

MARCA.- Wembley, que forma parte de la historia del Barcelona con letras de oro, no falló a los de Valverde. El cuadro azulgrana selló las grietas que aparecieron en su armazón en los últimos partidos de septiembre y parece que todo vuelve a la normalidad. Lo que no ha desaparecido es el sufrimiento. El cambio de sistema al 4-4-2 sacrificando a Dembelé fue el primer paso para este cambio hacia la victoria y el segundo lo fue una mala salida de Lloris, que dejó en bandeja el 0-1 de Coutinho a los dos minutos de partido. Después de tres partidos sin ganar en los que fue por detrás en el marcador comenzar ganando y tan rápido dio mucha confianza al Barça.

Un pase de esos que sólo sabe poner Messi superó a Trippier por alto y dejó a Jordi Alba sin marca en su banda, Lloris salió a lo loco y se quedó vendido cuando el lateral buscó a Coutinho que marcó casi a placer sin portero en la meta del Tottenham. Mejor arranque imposible. La confianza del Barça fue tal que el cuadro de Pochettino ni la olía. Los cuatro del centro azulgrana mandaban a su placer y los ingleses no sabía ni de qué color era la camiseta de Ter Stegen.

Un disparo lejano de Kane sin mucho peligro que detuvo Ter Stegen fue lo único destacado del cuadro londinense antes de que Rakitic sentenciara el choque con un potente derechazo desde fuera del área imposible de detener para el meta internacional francés del Tottenham. Pese al 0-2 a la media hora de juego, el Barça no reculó y buscó el tercero con ganas. Luis Suárez, Coutinho y Messi lo tuvieron en sus pies, pero no llegó la puntilla antes del descanso. Ter Stegen se dejó ver en una acción en la que Semedo estuvo a punto de meter un gol en propia puerta a remate de Son, pero los reflejos del alemán evitaron lo que hubiera sido un injusto 1-2.

Recital y dos postes de Messi

Los primeros minutos de la segunda parte fueron un recital de Messi. Uno más. Dos jugadas suyas acabaron en el poste de Lloris cuando no se habían cumplido los cinco minutosY de lo que podía ser un 0-4 sin exagerar lo más mínimo se pasó a un 1-2 después de que Kane demostrara su clase en la jugada siguiente al segundo poste de Leo. Recortó a Semedo en el área y cruzó ante Ter Stegen. Wembley rugió con el tanto inglés buscando dudas en el Barcelona pero no las hubo. Y menos con Messi en el campo.

Sin tiempo a que el Tottenham se lo creyera, sólo cuatro minutos después, el argentino buscó a Jordi Alba en banda y el centro del lateral azulgrana lo acabó rematando el propio Messi -después de que Coutinho y Luis Suárez dejaran pasar con acierto el balón- para el 1-3. Este tanto, tras 25 pases seguidos del Barça, dejó tocado al cuadro inglés, pero los de Pochettino no habían dicho aún su última palabra. Y está claro que esta temporada no hay partido tranquilo, por muy bueno que sea en ataque, para el Barcelona. Un disparo de Lamela desde fuera del área dio ligeramente en Lenglet y 2-3. El Tottenham se volvió a meter en el partido y con 90.000 almas apoyándole. Tocaba sufrir con 20 minutos por delante.

Pero el sufrimiento sólo lo puso Semedo, en dos malos controles dentro del área que pudieron meter en su lío a los suyos, y Lucas Moura con un remate desde cerca que envió a córner Lenglet. Rafinha y Vidal salieron para que los ingleses no tuvieran tanta posesión y sólo en los córners dieron alguna sensación de peligro los de Pochettino. Y fue Messi el que cerró el partido con un nuevo gol a pase de Jordi Alba tras otra dejada de Luis Suárez. Dos partidos, cinco goles, Messi quiere la Champions y no va mal encaminado.

El Barcelona recuperó la senda del triunfo, con sufrimiento, pero lo consiguió. Wembley, con hierba y sin hierba como en este caso, no falla al Barcelona. Un clásico.

Foto cortesía: Movistar+

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Napoli venció al Liverpool y encendió el «Grupo de la muerte»

MARCA.- El Napoli sacó la peor versión del Liverpool en lo que va de curso. Los ‘reds’, grises y sin chispa, se vieron sometidos por los ‘Azzurri’ durante muchas fases del partido… y acabaron cayendo 1-0 gracias al postrero gol de Lorenzo Insigne en el 90′.

Un triunfo que da un vuelco al Grupo C, ‘el de la muerte’, y pone la lucha por pasar a octavos al rojo vivo. El Nápoles ahora es líder con 4 puntos. Tres tienen PSG y Liverpool y cierra la clasificación, con uno, el Estrella Roja.

‘Carletto’ aprendió la lección tras caer 5-0 con el ‘Pool’ en pretemporada. ‘Su’ Napoli maniató a la temible ‘MSF’ de principio a fin. Ni rastro de Mané, Firmino y Salah. El primero (también sería el último) en decir ‘aquí estoy yo’ fue Lorenzo Insigne. En el 10′ conectó un disparo, tras una buena triangulación con Milik y Callejón, que salió rozando el poste.

Recibió el Liverpool una mala noticia acto seguido. Naby Keïta, una de las novedades en el once de Klopp, se retiró en camilla. La lesión no tenía buena pinta. Su concurso en el duelo por el liderato contra el Manchester City está casi descartado.

Alisson, en el 33′, debió emplearse de nuevo a fondo para sacar un disparo a la media vuelta de Milik. De Ospina, en cambio, no había noticias. Allan, omnipresente en mediocampo, se encargaba de anular cualquier intento de ataque visitante.

El Nápoles, volcado sobre el costado izquierdo con Insigne y Mario Rui incrementó sus llegadas al área de Alisson en la segunda mitad. Milik (49′) y el exbético Fabián (51′) lo intentaron sin éxito desde fuera del área. El propio Fabián, titular, se enredó demasiado en una jugada que se quedaba mano a mano en el 58′.

Se mascaba el gol en San Paolo. Joe Gómez salvó bajo palos un tiro de Callejón en el 75′ y Mertens, poco después, remató al larguero un centro de Mario Rui.

Klopp daba el punto por bueno y decidió amarrar dando entrada a Fabinho. Ancelotti, en cambio, apostó por ‘renovar’ el ataque: Mertens, Zielinski, Verdi… Una apuesta que dio resultado en el 90′. Apareció Callejón por derecha y apareció Insigne para rematar, a puerta vacía, el 1-0.

Foto cortesía: MARCA

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Real Madrid cayó frente al CSKA y prolonga su mala racha

AFP.-El Real Madrid, vigente triple campeón de Europa, cayó 1-0 este martes ante el CSKA de Moscú en la 2ª jornada de la Liga de Campeones, lo que permite a los rusos hacerse con el primer puesto del grupo G.

El delantero Nikola Vlasic aprovechó un error en un pase de Toni Kroos para hacer el gol de la victoria del CSKA en el estadio Luzhniki de la capital rusa, donde acabó con diez por la expulsión del portero Igor Akinfeev por doble amonestación (90+4).

El equipo moscovita lidera ahora el grupo G por delante de la Roma, segundo tras ganar este martes al Viktoria Pilsen, mientras el equipo blanco es tercero de la llave.

El resultado no ayuda a resolver las dudas del equipo blanco, que tras no ganar en sus dos últimos encuentros en Liga, cosechó ahora esta derrota.

Los palos, hasta tres, y la falta de acierto frente al marco contrario en un partido que dominó, condenó a un Real Madrid lastrado por las bajas, que acumula de paso tres partidos consecutivos sin marcar, algo que no le pasaba desde 2007.

«Lo que tenemos que intentar es seguir generando el máximo de ocasiones posibles y el equipo no tengo dudas que volverá a ver portería y a la senda de la victoria», aseguró el técnico blanco Julen Lopetegui, tras el partido.

Desorientado 

El Real Madrid, sin Bale, Marcelo, Isco, ni Sergio Ramos, se vio sorprendido por el rápido gol local cuando apenas había comenzado a rodar el balón.

Vlasic interceptó un mal pase atrás de Kroos para meterse en el área y soltar un disparo ajustado al palo derecho de Keylor Navas.

El gol desorientó al Real Madrid que durante los primeros veinte minutos multiplicó las imprecisiones y las pérdidas de balón ante un CSKA, muy peligroso en los contraataques.

Los locales llegaban pero con el paso de los minutos, el equipo blanco empezó a tranquilizarse y a tomar las riendas del encuentro.

Un disparo de Feodor Chalov aprovechando un balón muerto en el área, detenido por Keylor Navas, marcó el cambio de tendencia.

El Real Madrid empezó a encerrar al CSKA en su área, empujando por las bandas, especialmente por la derecha, donde aparecían Lucas Vázquez y Dani Carvajal para meter balones al área.

Carvajal, lesionado, tendría que retirarse cerca del descanso añadiendo más efectivos a una ya nutrida enfermería blanca de cara a los próximos encuentros.

Sin puntería 

El equipo ‘merengue’ llegaba con relativa facilidad, pero le costaba encontrar el hueco en un equipo ruso cerrado.

Casemiro lo intentó con un disparo lejano que fue al palo y Karim Benzema soltó otro tiro que se fue arriba por poco.

El francés, uno de los que más peleó en el área, se encontró después con el larguero en un remate de cabeza en la que sería la última de la primera parte.

Tras el descanso, el técnico Julen Lopetegui metió a Luka Modric por Casemiro y a Mariano por Lucas Vázquez buscando más mordiente.

El Real Madrid se volcó sobre la portería rusa, pero no acababa de generar ocasiones clara, mientras el CSKA seguía cerrado atrás buscando sus oportunidades al contraataque.

Ante la dificultad para forzar la defensa local, Marco Asensio lo intentó con un disparo desde la frontal que sacó Igor Akinfeev.

Otro tiro lejano de Kroos se fue fuera por poco para desesperación de un Real Madrid, que volcado adelante se llevó otro susto cuando Jaka Bijol se sacó un disparo que detuvo Navas.

El Real Madrid tuvo su última oportunidad en un cabezazo de Mariano al palo en el último minuto.

«No nos han salido las cosas como hemos querido, pero no es justa la derrota», sentenció tras el partido el defensa Nacho Fernández.

Foto cortesía: Marca.

La Juve venció al Young Boys con triplete de Dybala

Prensa Juventus.- En el primer partido de la temporada en el que hubo que echar de menos a Ronaldo, la Juve reencontró a Paulo Dybala. Y no es que hubiese faltado en los partidos anteriores, pero la clase y la confianza con la que ha cerrado el partido en media hora, y cómo ha culminado su obra en la segunda parte, son las de su mejor época. El Young Boys no es uno de los rivales más complicados que el panorama europeo pueda ofrecer, es verdad, pero tiene el físico suficiente como para hacer que los bianconeri no puedan infravalorar el compromiso. Y por eso, si a la actitud adecuada se unen las proezas de la Joya, el partido se transforma desde el principio en un monólogo bianconero.

La primera acción ya es una obra de arte: a los cinco minutos, Bonucci manda un balón desde cuarenta metros que supera a Camara y llega dócil a la zurda de Dybala, que sin dejarla caer la manda a las redes.

Con la ventaja tan temprana los bianconeri se relajan un poco, y el despliegue de los suizos es todo menos defensivo. Sus cinco centrocampistas cierran bien los espacios y las líneas de pase, pero la Juve tiene armas para atravesarlas. Tanto que poco después de la media hora de juego la Joya vuelve a iniciar una jugada en el centro del campo, asiste para Cuadrado, sigue la acción y llega para rematar el rechace de von Ballmoos, que no consigue atrapar el tiro de Matuidi, haciendo el segundo.

El tercer gol estuvo a punto de llegar nada más empezar la segunda parte con una gran jugada de Bernardeschi que acabó con un tiro al palo de Dybala Ambos equipos seguían atacando, si bien la Juve daba más sensación de peligro. Y para desmostrarlo, llegó el tercero de la Joya arriva después de una acción magistral: Alex Sandro se apoya en Emre Can, este en Mandzukic, balón al área para Cuadrado y toque al medio para Dybala, que la manda a la red a dos pasos. Todo a un toque. Espectáculo en estado puro.

Pese a la expulsión de Camara, la Juve no vio necesidad de hurgar en la herida, limitándose a dominar, si bien hay que destacar algún destello de Kean, que entró en el puesto de Mandzukic. Y de esta forma el noveno partido de esta temporada también se cierra con una victoria, con aplausos y, aún más importante, con el primer puesto con pleno de puntos en el grupo de Champions y con un paso decisivo hacia los octavos de final.

JUVENTUS-YOUNG BOYS 3-0

GOLES: Dybala 5′ pt, 33′ pt e 24′ st

JUVENTUS
Szczesny; Barzagli, Bonucci, Benatia; Cuadrado, Matuidi (1′ st Emre Can), Pjanic (25′ st Khedira), Bernardeschi, Alex Sandro; Dybala, Mandzukic (33′ st Kean)
A disposición: Perin, Cancelo, Chiellini, Bentancur
Entrenador: Allegri

YOUNG BOYS
von Ballmoos; Schick, Camara, Von Bergen, Benito; Fassnacht (26′ st Assale), Sow, Sanogo (1′ st Lauper), Bertone, Sulejmani (25′ st Ngamaleu); Hoarau
A disposición: Wolfi, Garcia, Aebischer, Nsame
Entrenador: Seoane

ÁRBITRO: Karasev (RUS)
ASISTENTES: Demeshko (RUS), Lunev (RUS)
CUARTO ÁRBITRO: Averianov (RUS)
ÁRBITROS DE ÁREA: Ivanov (RUS), Moskalev (RUS)

AMONESTADOS: 24′ pt Bertone, 42′ pt Sanogo, 30′ st Camara, 33′ st Camara

EXPULSADOS: 33′ st Camara

Foto cortesía: Juventus.