Tony Cittadino (Mallorca).- Luis Manuel Fernández fue uno de los periodistas deportivos más queridos y admirados de la década de los 90 en Venezuela. Su vertiginoso, pero corto paso por los medios de comunicación, le sirvió de tribuna para compartir su talento y ser la inspiración de una generación que lo vio como un ejemplo.
En este trabajo, conversamos con algunos de sus compañeros en los medios y con su familia, para recordar su exitosa carrera. Luis Manuel se graduó como periodista en la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) en 1989 y el primero en darle la oportunidad en los medios fue el comentarista deportivo Reyes Álamo.
Luis Manuel comenzó trabajando en el programa de radio Deportes en Acción en Radio 1300 AM junto a Álamo y luego compartió pantalla en la Televisión Nacional (Canal 5) y Venezolana de Televisión (VTV). “Me ayudó bastante, porque me hacía el beisbol y otros deportes y así me descargué un poco. Se me abrió el cielo, porque nadie quería hacer el programa diario porque tenían que pararse temprano”, explicó Álamo.
Allí realizó el noticiero, narraba el fútbol italiano y tuvo una actuación destacada en el Mundial Italia 90. En la Copa del Mundo, compartió con el destacado comentarista Sergio Biferi, tanto en las narraciones de los encuentros, como en los resúmenes diarios que se realizaban en la noche. Ambos recibieron un espaldarazo del presidente del canal, al darles el espacio nocturno del Mundial.
“Les voy a decir algo, muchachos, Reyes Álamo, Tury Agüero y Pedro Zarraga, no necesitan más pantalla. Yo quiero que a partir de esta noche, el resumen del Mundial lo hagan ustedes dos. Para nosotros fue una alegría enorme, pero estábamos con el temor de cómo reaccionarían nuestros compañeros”, recordó Biferi.
Su consagración en Venevisión
El gran momento de Luis Manuel llegó al ser contratado por Venevisión en el año 1994. Una cara fresca y con mucho conocimiento, sirvió para dar un vuelco en la presentación de noticias deportivas en nuestro país. Marcó un estilo y con él, el camino al éxito.
El experimentado periodista Unai Amenabar fue su profesor en la UCAB y recordó los inicios de Luis Manuel en el canal 4 como exitosos, pues tenía el dominio del deporte y de la cámara. “Cuando iba al aire, él llevaba unos papeles con unos tips y, aunque le pasaran el prompter arrancaba a hablar y no tenía nada que ver con lo que decía el guión. Tenía una capacidad de improvisación bárbara”.
Por su parte, el brillante narrador deportivo Fernando Arreaza, catalogó su paso por Venevisión como fulgurante. “Por lo general, darse a conocer en este medio lleva un proceso que es difícil adelantar, pero él con su carisma, lo adelantó. Se dio a conocer en tiempo récord y con el segmento deportivo del Noticiero Venevisión, penetró en todas las casas de Venezuela e inmediatamente se hizo querer”.
Hebe Torres, viuda de Luis Manuel, destacó la pasión y entrega que le imprimía el periodista a su trabajo. “Tenía una vida súper agitada. Llegaba de la radio, hacía ejercicios y se iba al Noticiero. Luego, regresaba a la casa, almorzaba, se recostaba una hora y volvía a hacer ejercicios. Salíamos a dar una vuelta, luego cenaba y sentaba a leer los periódicos. Leía de todo, no sólo deportes. Se iba al Noticiero, regresaba a las 12:00 o 1:00 de la madrugada, se volvía a parar para estar en la radio a las 6:00 de la mañana y así era su vida”.
El Mundial Estados Unidos 1994
El éxito de Luis Manuel no sólo se vio reflejado en el Noticiero. Su talento explotó con más contundencia en su primer gran evento deportivo: el Mundial de Estados Unidos 94.
Arreaza no tiene dudas en asegurar que el mejor momento de la carrera de Luis Manuel fue ésa Copa del Mundo. “Fue un momento estelar, un momento cumbre. Como narrador de fútbol se puso en un sitial muy especial”, reflexionó.
El otrora director de transmisiones de Venevisión, Gustavo Marrero, coincidió con Arreaza, pues además fue parte del equipo de transmisiones que cubrió la Copa del Mundo en Estados Unidos. Para él, la narración del gol de Jürgen Klismann de Alemania ante Corea del Sur fue muy especial. Incluso considera que fue la mejor narración de su carrera.
“Esa narración fue épica. Estábamos en el estadio con Venevisión y tener la emoción de escuchar a Luis a un lado y ver esa imagen del gol en vivo…Fue la mejor, por todas las cosas que tuvo”.
La versatilidad en las olimpiadas Atlanta 96
Además de establecerse cómo uno de los mejores narradores del béisbol y el fútbol, Luis Manuel mostró toda su versatilidad en los Juegos Olímpicos Atlanta 96, al que asistió ya estando quebrantado de salud.
Marrero recalcó que los Juegos Olímpicos marcaron un antes y un después en la carrera del periodista de la UCAB. “Las olimpiadas lo consagraron. Al recordar la narración del nadador Francisco Sánchez se me paran los pelos. Luis transmitió la emoción a cada venezolano como la sentía él en ése momento. En olimpiadas es dónde ves la versatilidad de la gente, porque hay demasiados deportes. Hablaba de judo, como hablaba de beisbol o de esgrima igual que baloncesto”.
La periodista Dynalba Salas también compartió el estudio del Noticiero con Luis y ratificó el extenso conocimiento deportivo que tenía su compañero. “Transmitía exactamente lo que era, porque era un tipo al que le gustaba el deporte. No era un narrador deportivo de fútbol o de beisbol, a él le gustaba el deporte y él vivía por el deporte”.
Su época en Radio Deporte
Otra de las brillantes facetas de Luis Manuel, fue trabajar en la radio. Allí expandió su conocimiento y llegaron reconocimientos como el Premio Nacional de Periodismo y el Meridiano de Oro.
En Radio Deporte 1590 AM tuvo un programa llamado En Primera Fila, en el que tuvo como productora a la periodista Carlota Fuenmayor. La profesora de la UCAB lo recuerda como uno de sus grandes maestros del periodismo y un gran amigo de la familia.
Fuenmayor tuvo la oportunidad de ser profesora de radio de Luis Samuel Fernández, hijo de Luis Manuel, quien había sido el paje de su boda y a quien le entregó un valioso maletín que el periodista le había encomendado a ella días antes de fallecer.
“Uno cree que los niños no crecen, que siempre van a ser chiquitos. Cuando lo vi en el salón, lo abrazaba y le daba besos. No lo podía creer. Fue increíble que la vida me diera la oportunidad de enseñarle a hacer radio, como su padre me enseñó en su momento”.
Luis Samuel no ocultó su emoción y su asombro por poder contar con material tan valioso de su padre. “Lo abrí al llegar a la casa y había de todo. Tenía todas las tarjetas de todas las cosas que hacía. Tenía documentos, bolígrafos y credenciales. Es increíble. Son recuerdos que nos faltaban de él”.
A un paso del Mundial Francia 98
El tiempo pasó y con él, la enfermedad, que le impidió estar en el Mundial Francia 98. Sin embargo, Luis Manuel realizó una impecable cobertura del sorteo de la Copa del Mundo, su último gran evento deportivo.
Torres recordó que el periodista no se recuperó completamente de la última operación del estómago, pero que lo impulsó a cubrir el evento en Francia, no sólo porque era su pasión, sino porque él se sentiría muy mal anímicamente si no asistía al sorteo. “Igual todo el mundo lo vio en televisión. Nunca se quejó. Se fue porque lo obligué a ir, porque no quería ir”, recordó.
Para ese entonces, Biferi seguía trabajando en VTV y recordó una anécdota en las afueras del estadio Velódromo de Marsella que le impresionó en su momento, porque Luis Manuel tenía apenas 11 días de haber sido operado. “Le dije ‘tú estás loco, cómo estás aquí después de 11 días’. El frío era de menos dos grados en Marsella y me dijo que se sentía bien, recordando además que el médico lo autorizó y Venevisión le brindó su respaldo”.
En tanto, Marrero reiteró que si Luis Manuel asistía a esa Copa del Mundo, sería posiblemente el evento que marcaría su entrada a una gran cadena internacional y, por ende, su salida de la pantalla venezolana. “Eso era inevitable. Se lo iban a llevar”.
Arreaza recordó Luis Manuel quería estar presente en todas las pautas deportivas del canal, porque quizás sentía que no podría vencer la enfermedad. “En el fondo, sabía que el tiempo jugaba en su contra y vivía apurado, vivía intenso, vivía un paso adelante. No quería dejar de hacer ninguna transmisión y cuando Héctor Cordido no lo pautaba, se ponía bravo y se peleaba con él en buenos términos.
Su muerte conmocionó al país
Su muerte, el 24 de marzo de 1998, estremeció al país. Con apenas 30 años, se marchaba en medio de gran una conmoción que llevó, incluso, el reconocimiento del para entonces presidente de la República, Rafael Caldera, quien asistió al velorio en Caracas.
La transcendencia de su fallecimiento fue tal, que Amenabar aseguró que ha sido la noticia más dura y dolorosa que le ha tocado transmitir en su carrera. “Dynalba no pudo seguir hablando y el resto de la nota la terminé leyendo con cara de póker, porque era así. Fue de los momentos más duros, porque era un excelente compañero de trabajo y un tipo muy afectuoso y alegre”.
Arreaza recibió la noticia en los campos de entrenamiento de los Filis de Filadelfia y estaba acompañado del para entonces dueño de los Leones del Caracas, Oscar Prieto Párraga, el lanzador Omar Daal y el jardinero derecho, Bob Abreu. “No sabía que el final era inminente. Uno no lo podía creer”.
Una de las últimas personas en verlo con vida fue Marrero, quien asistió a su casa en Montalbán y rememoró el momento entre lágrimas. “Fui y estaba en su cama, acostado. No le dije nada, le di un beso en la frente y me miró. Nos despedimos y le dije que lo quería mucho. Cuando estoy abajo del edificio, me llama el cuñado y me dijo que Luis había muerto. Me dijo que estaba esperando que viniera, para irse”.
Marcó a una generación
Luis Manuel fue un periodista por encima del promedio y quién además supo nutrirse de los más experimentados colegas. Su versatilidad, profesionalismo y carisma, le permitieron ganarse un lugar entre los grandes.
“Era simpático, era espontáneo, era agradable y estudiaba, que es el problema que tienen muchos jóvenes hoy. Qué diferente es la televisión de hoy en día, a la que hacíamos nosotros”, comentó Álamo.
Salas añadió que estaba por encima del promedio, porque era un hombre por encima del promedio y fue una referencia. “Creo que para ser un profesional de altísima calidad, tienes que tener alma. Fabricó o perfeccionó un molde, que aunque incorpores tu estilo particular, hay como unas líneas a seguir”.
Biferi también dio elogios a su ex compañero, a quién siempre recuerda con sentimiento. “Era un periodista muy preparado en varias disciplinas, quizás en muchas. En nuestra generación, estaba un escalón por encima, lo reconozco de todo corazón”.
Su hijo, Luis Samuel, agradeció el aprecio que le han demostrado a su padre, a pesar de tener más de 20 años de fallecido. “He visto todos los videos en Youtube y me parece increíble que las personas lo quieran tanto y que lo recuerden con tanto cariño”.
El legado de Luis Manuel es incalculable. Aunque han pasado los años, sus relatos en los deportes recuerdan una época maravillosa en nuestro país y allanó el camino para que muchos siguiéramos su ejemplo. En nuestro caso, realizar la sección de deportes de Venevisión fue un sueño que llevamos adelante con pasión y respeto.
Ahora le toca a las nuevas generaciones, conocer y aprender de Luis Manuel Fernández, un periodista fuera de serie.
Ojalá se le diera un homenaje en darle el nombre de un campeonato de la lvpb. Fue un excelente periodista . Narrador era muy completo. Yo salía del colegio corriendo para llegar a tiempo para ver la notas deportivas.
Excelente documental y más que merecido homenaje a Luis Manuel Fernández
Hola, Juan Carlos. Gracias por ver el documental y por tu mensaje! Un gran abrazo!