NBA.- Fue como si el espíritu de Reggie Miller, Paul George, Chuck Person y otros grandes tiradores de la historia de la franquicia se hubiera hecho presente en el Bankers Life Fieldhouse de Indianápolis. Indiana Pacers, con una lluvia de triples, aplastó por 144-117 a Charlotte Hornets en un partido de Play-in en el que no había mañana y que Indiana entendió como tal, por lo que todavía cuentan con la ilusión de llegar a los Playoffs mientras que para los Hornets se acabó la temporada 2020-2021.
Indiana no sintió la baja de Caris LeVert, afuera horas antes del partido debido al protocolo de salud y seguridad que se espera que lo margine de las canchas por al menos 10 días. Su producción ofensiva no se extrañó para nada en un equipo que llegó a anotar 144 puntos (su segunda cifra más alta de la temporada), que tiró 16-35 en triples y que tuvo a ocho jugadores distintos con al menos 12 puntos o más.
Domantas Sabonis comenzó el partido bastante fastidioso, sumando en los rebotes pero con problemas para encestar y quejándose mucho con los árbitros. El All-Star de los Pacers logró reponerse de eso y finalizó con una planilla de 14 puntos (7-15 en tiros de campo), 9 asistencias y 21 rebotes para un equipo que terminó encestando un 55,2% de sus lanzamientos al aro: 58-105.
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Sin embargo, los tres máximos anotadores de Indiana no estaban entre los hombres esperados: fueron Oshae Brissett, Doug McDermott y TJ McConnell, tres habituales suplentes. Los dos primeros salieron esta noche como aleros titulares y sumaron 23 puntos en el caso de Brissett y 21 en el caso de McDermott. Doug fue la estrella del primer cuarto, en el que sumó ¡16 puntos! encestando cuatro triples en el inicio.
En tanto McConnell hizo su habitual trabajo defensivo desde el banco pero se encontró con buenas chances en ataques en transición y luego sumó un poco más en la segunda parte: finalizó con 17 puntos, 5 rebotes, 3 asistencias y 4 robos. Lo de Malcolm Brogdon no fue muy espectacular en los números, con 16 puntos y 8 asistencias, pero fue clave para el juego ofensivo de un equipo que movió muy bien el balón y que pudo darle descanso a Brogdon en todo el último cuarto: apenas disputó 21 minutos del partido.
Desde el banco también aparecieron los jóvenes Goga Bitadze, con un doble-doble de 14 puntos y 10 rebotes, y Kelan Martin, con 14 tantos.
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Para los Charlotte Hornets tiene que ser dolorosa no solamente la derrota ante Indiana Pacers, sino también la forma: estuvieron lejísimos de sus mejores rendimientos de la temporada, siendo un equipo con poca energía defensiva y sin puntos en las manos en ataque en la primera parte: apenas encestaron 45 y así se fueron al entretiempo perdiendo por 24 tantos de diferencia.
Sus máximos anotadores fueron Miles Bridges con 23 puntos y Cody Zeller con 17 tantos (7-7 de campo), lo que denota un problema para el equipo: las actuaciones de Terry Rozier, LaMelo Ball y Devonte’ Graham fueron decepcionantes. LaMelo terminó con 14 puntos, 4 asistencias y 4 pérdidas lanzando 4-14 de campo, Rozier con 16 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias y Graham con 4 puntos y 4 asistencias firmando un 1-7 desde el triple. Malik Monk, autor de 13 puntos, generó algo de chispa desde el banco pero no la suficiente en un perímetro compuesto por jugadores talentosos en ataque que terminaron quedando atrapados y sufrieron en defensa.
Foto: Gigantes del Basket
