Salvatore Iodice, el artista que restauró el mural de Maradona y cambió la vida de Quartieri Spagnoli

Tony Cittadino (Madrid).- El artista Salvatore Iodice jamás pensó que la restauración del mural de Diego Armando Maradona en 2016, cambiaría la vida de los habitantes de Quartieri Spagnoli, el barrio napolitano que se ha convertido en un lugar de peregrinaje constante desde que falleció el Pelusa en 2020.

Iodice realizó el trabajo, sin saber todo lo que pasaría después. La obra fue pintada originalmente por Mario Filardi en 1990, para celebrar los títulos ganados por el astro argentino en su paso por el mítico club del sur de Italia.

Todo comenzó al colocar unas flechas de señalización dentro de la ciudad, para ayudar a los turistas a ubicarse. Sin embargo, cuando creó la del mural de Maradona, se dio cuenta que, al llegar, la obra y el lugar estaban descuidados. Prácticamente, abandonados.

“Cuando llegué al mural de Maradona, prácticamente me encontré con una situación lamentable, porque el mural había desaparecido casi por completo y había una ventana en lugar de una cara. Entonces, me pregunté: ¿o quito las flechas o restauro el mural? Y como todo el mundo sabe, no quité las flechas”, dijo en la entrevista publicada en nuestro canal de Youtube.

Iodice, inicialmente, cambió la ventana en la que la cara de Diego estaba borrada y comenzó a restaurar el mural. La vivienda con la ventana más famosa de Napoli es propiedad de la familia Vitiello.

“Quise devolver la cara a Diego y al barrio, que la había perdido un poco con el tiempo, por las cosas que antes se sentían mucho más: la delincuencia, el tráfico de drogas, la Camorra y todas esas cosas negativas. Entonces, ¿qué hice? Conseguí un camión grúa con el que pude subir al muro. Todos estaban contentos de que este mural volviera a la vida”.

UN APORTE PARA TODA LA VIDA

El artista contó desde su taller en Quartieri Spagnoli, que se siente orgulloso por haber aportado al crecimiento de la ciudad, pero específicamente, de su querido barrio.

“Mi idea era darle una motivación diferente a la que Mario le había dado a esta obra, que fue en honor de los aficionados de la Curva. Quería hacer una operación un poco más amplia y quería dedicárselo a toda la ciudad. Ya no era por el Napoli, sino para Napoli y funcionó muy bien, aunque luego las cosas explotaron por completo. Realmente nos vimos sumergidos bajo océanos de gente cuando murió Maradona. Ese día, el mundo entero, en vez de conectarse con Argentina, se conectó con Quartieri Spagnoli”.

Iodice, visiblemente emocionado, contó que tuvo la oportunidad de hablar con Maradona luego de la restauración en 2016. Fue con un contacto telefónico y es algo que recuerda con muchísima satisfacción.

De hecho, de acuerdo a un estudio del diario financiero Il Sole 24 ore, el Largo Maradona fue el lugar más visitado de Italia en 2023, sólo por detrás el Coliseo en Roma. Eso puede dar una dimensión de la cantidad de personas que asisten.

Se estima que recibe seis millones de personas al año, si bien no hay registro de entradas, porque no se venden para ir a un lugar preciso.

“A través de este turismo de grandes números hay una recualificación y una revalorización de nuestra zona a nivel mundial. Piensa que el mural de Maradona es el sitio más visitado de Italia después del Coliseo. Este es mi mayor orgullo personal. Pude hacer algo por mi ciudad, a través y con la ayuda de Diego Armando Maradona, que es un número uno absoluto, que no tiene competencia con nadie, ni como hombre, ni como artista. Porque Maradona era un artista, no era un futbolista”.

Para Iodice, el campeón del mundo con la albiceleste en 1986, es más napolitano que argentino. Coindice con varios habitantes de la ciudad en que el 10 se sentía como en casa y siempre tuvo el apoyo de su gente. Eso se mantiene y va en crecimiento, casi 40 años después de su salida del club.

“Era un napolitano, que no sabía que era napolitano. Llegó de Argentina y enseguida se sintió como en su casa. Hay murales de Maradona por ahí, que son realmente maravillosos. Este no es artísticamente el mejor, pero la diferencia es la motivación. Maradona dijo una vez: si con mi figura, la gente de Napoli puede encontrar algo para comer, por mí está bien así”, recordó el artista napolitano, que cambio la realidad de Quartieri Spagnoli.

Anna Vitiello cuenta con orgullo la historia de la ventana más famosa de Napoli

Tony Cittadino (Madrid).- La historia de Quartieri Spagnoli en Napoli, comenzó a cambiar desde 2016. Para entonces, el artista Salvatore Iodice decidió restaurar el mural de Diego Armando Maradona y transformó por completo el sitio en un lugar de peregrinaje y puesto obligado para el turismo. Anna Vitiello vive en la casa ubicada en la vía Emanuele de Deo y relata que a diario se vive una auténtica locura.

La muerte del astro argentino en 2020, le dio un vuelco al lugar. Pasó de ser un callejón humilde y con un estacionamiento abandonado, a ser un sitio de congregación permanente al que llegan miles de personas para recordar al campeón del mundo con Argentina en 1986.

Cuando compraron la casa, el mural estaba deteriorado y jamás pensaron que se daría el fenómeno de peregrinación que se vive actualmente. La ventana del baño se convirtió en el punto fijo de miles de miradas, para ver la cara de Maradona.

“Mi padre aceptó la propuesta de Salvatore de restaurar el mural, pero nunca pensamos que nuestra vida cambiaría drásticamente. Ahí cambió todo, porque al venir turistas, mejoró la economía de la zona. Los comercios comenzaron a abrir y a vender mucho más. Todo esto se incrementó con la muerte de Maradona”.

Vitiello recordó que aquél 25 de noviembre de 2020, los fanáticos se comenzaron a congregar debajo de su casa de forma espontánea, para rendir tributo al jugador más transcendental que ha pasado por la historia del club fundado en 1926.

“Comenzaron a llegar con fuegos artificiales, para dar el adiós al jugador y desde ese momento, es un punto de peregrinaje. Vienen a llorarlo, a saludarlo, dejan camisas y bufandas. Cuando ganamos el tercer scudetto, un fanático argentino fue al negocio de mi papá y le pidió venir a nuestra casa. Lloraba como un niño y me impresionó”.

RENACIMIENTO Y CRECIMIENTO DEL PUEBLO

De acuerdo a un estudio del diario financiero Il Sole 24 ore, el Largo Maradona fue el lugar más visitado de Italia en 2023, sólo por detrás el Coliseo en Roma. Eso puede dar una dimensión de la cantidad de personas que asisten.

Se estima que recibe seis millones de personas al año, si bien no hay registro de entradas, porque no se venden para ir a un lugar preciso.

“Un estudio de las asociaciones Unioncamere e Infocamere revela que las actividades económicas en un radio de un kilómetro cuadrado desde el santuario de Maradona crecieron el 5,5 % respecto a 2019, cuando el jugador aún estaba vivo y no había pandemia, y un 6,5 % respecto a 2021”, agregó el diario Il Corriere dello Sport”.

“Ya estoy acostumbrada a lo que sucede. Lo vivo todos los días. Pero no me veo viviendo fuera de aquí. A veces me siento observada en el baño, porque sabemos que hay mucha gente abajo haciendo fotos a la ventana de mi casa. Vi a mi barrio transformarse. Es un renacimiento y es una cadena increíble. En Navidad o en Semana Santa no salgo de casa, porque no se puede pasar. No encuentro las palabras para decirlo”.

Vitiello dijo que ha visto turistas extranjeros de diversos países, pero, obviamente, los primeros son argentinos. “He visto alemanes, americanos, brasileños, de todas partes. Este Murales regó el amor de Diego por todo el mundo y, desde que no está más, ha aumentado”.

El movimiento que se ha creado en el pueblo del sur de Italia, se ha convertido en un movimiento deportivo, cultural, social y hasta religioso, pues la gente va a rezar al lugar.

“Es cierto punto he pensado que es un movimiento religioso, porque para ellos es una pasión y una fe. Muchos te dicen que creen en él y le encienden una vela o le dejan una bufanda. Vienen a ver el mural y dicen que es como si lo sintieran. Algunos turistas me dicen que sienten a Maradona y se emocionan”.

El mural también se ha convertido en punto de unión para jugadores y exjugadores, no sólo del Napoli, sino del fútbol mundial. “Antonio Conte u otras personas han venido, pero no los ha visto. Pero han pasado cosas como cuando ganamos el cuarto scudetto, que los fanáticos ya habían quedado desde la noche anterior del partido en carpas”.

Vitiello disfruta este proceso y que sirva de aporte para la ciudad, pero quiere dejar claro que en ningún momento reciben algún tipo de dinero o de colaboración. De hecho, tienen su propio negocio cerca y no tienen necesidad de ello.

Por esa razón, ha creado una cuenta llamada Ventana Maradona en Instagram y Tik Tok, para aclarar las cosas y también para que puedan conocerlos.

“Detrás de la ventana hay una familia que tiene un negocio y trabaja por su parte. Somos muy fanáticos del Napoli y estar en esta casa me da una carga emocional muy grande. Es injusto que algunos nos juzguen sin saber, pero no puedo pensar que haya gente que diga que lo hacemos por dinero. La idea es enseñar a la gente cómo vivimos aquí. Algunos influencers vienen y cuentan la historia de manera errada, porque piensan que el mural fue pintado ahora y preguntan por qué la cara está justo en la ventana y no más abajo”.

Foto: Cortesía Alessandro Tione

Museo Maradona, el tesoro personal de Massimo Vignati en el corazón de Quartieri Spagnoli

Tony Cittadino (Madrid).-  Su padre, Saverio, fue por casi 40 años el conserje y encargado del otrora llamado Stadio San Paolo di Napoli. Su madre, Lucia, la cocinera predilecta de Diego Armando Maradona por su pasantía por la ciudad del sur de Italia. Con este bagaje, Massimo Vignati seguramente fue el adolescente más envidiado de Napoli en los 80‘. Tiene los mejores recuerdos familiares del Pelusa y eso le permitió guardar las reliquias que hoy presenta en el Museo Maradona.

El local está ubicado en el corazón de Quartieri Spagnoli, un barrio del sur de Italia que se ha convertido en el centro de peregrinaje predilecto para recordar al astro argentino, fallecido el 25 de noviembre de 2020.

“Tuve la suerte de conocer a Diego como persona y te puedo asegurar que era más fuerte y mejor que el jugador. Nunca olvidó dónde nació, siempre fue humilde y ayudó a mucha gente. Junto a mi papá, es un ejemplo para mí. Diego se hizo daño, pero no dañó a nadie. Es mi hermano mayor e imagina que somos una familia de 11 hijos y digo que él es el 12, pero mi mamá dice que es el primero”, contó al lado de una estatua de Diego en el medio del Museo.

Vignati, tiene verdaderas joyas en la instalación. No hay valor monetario que pueda cuantificar lo que guarda con recelo y orgullo, porque son objetos que el propio Maradona le regaló a la familia o a él. Desde el contrato firmado con el Napoli en 1984, hasta diversas camisas, el banquillo donde se sentaba Maradona en el camerino o la mítica chaqueta con la que hizo el calentamiento con la canción Live is Life.

“Anécdotas tengo muchas, pero todos los lunes jugaba futbolito con Diego. Imagínate lo que es eso. Dormía en su casa y los martes me iba con él a los entrenamientos. Viví una fábula. Diego iba a los cumpleaños en mi casa. Cuando tenía que ir jugar fuera de Napoli, Claudia (su esposa) iba a comer a la casa con las hijas”.

El Museo tiene diversas camisas con las que hizo historia no sólo con Argentina, sino con el Napoli. Cada metro cuadrado es una reliquia. También hay zapatos, balones, banderines y, por ejemplo, la mascota Ciao del Mundial Italia 1990, que Pelé le regaló a Maradona antes de la Copa del Mundo.

“Napoli es un país aparte. El napolitano tiene una marcha más. Maradona para nosotros es inmortal y por eso creé el Museo. Ciudades como Madrid tienen el museo del equipo y pensé que no era posible que él no tuviera el suyo. Pero es poco para lo que se merece”.

Con semejante colección, es normal que existan personas que quieran comprar o entrar en subastas. Sin embargo, Vignati ha rechazo innumerables ofertas.

“El dinero no lo es todo, porque sino hubiéramos salvado a personas queridas. Hay personas que a diario me ofrecen miles o millones de dólares, incluyendo jeques, pero siempre los he rechazado, porque Diego se ama, no se vende. Estas cosas son como mis hijos y mi mamá. No tienen precio. Son los recuerdos de mi familia”.

UN NAPOLITANO, ARGENTINO

Para Vignati, Maradona fue un napolitano nacido en Argentina, pero asegura que como es amado es la ciudad, no lo es en ninguna otra parte del mundo.

“Si Maradona hubiera ido a otro lugar, no hubiera sido Maradona. Es una ciudad bellísima y vino a engrandecerla. Fue un rescate social y ayudó a resurgir a Napoli. Tuvo un carisma que pocas personas transmiten. Se fue el cuerpo, pero no su alma. A diario vienen miles de personas para ver el mural”.

El fenómeno de idolatría y peregrinaje que hay en Napoli, no sucede en otra ciudad del mundo y tampoco con ninguna otra leyenda, como Pelé o Franz Beckenbauer. La ciudad siempre tuvo fervor y respeto por el 10, pero desde su partida se ha multiplicado.

“Para nosotros, es como un Dios. Tenemos dos santos en ciudad. San Gennaro y él. La gente toca la estatua que tengo en el Museo y algunos lloran. Se emocionan. Fue un jugador que fue más allá de lo común”.

De acuerdo a un estudio del diario financiero Il Sole 24 ore, el Largo Maradona fue el lugar más visitado de Italia en 2023, sólo por detrás el Coliseo en Roma. Eso puede dar una dimensión de la cantidad de personas que asisten.

Se estima que recibe seis millones de personas al año, si bien no hay registro de entradas, porque no se venden para ir a un lugar preciso.

“Un estudio de las asociaciones Unioncamere e Infocamere revela que las actividades económicas en un radio de un kilómetro cuadrado desde el santuario de Maradona crecieron el 5,5 % respecto a 2019, cuando el jugador aún estaba vivo y no había pandemia, y un 6,5 % respecto a 2021”, agregó el diario Il Corriere dello Sport”.

“¿Sabes lo que eso significa? Los fines de semana vienen mareas de personas. Maradona defendió al pueblo. Napoli podrá ganar más títulos, pero él siempre va a estar presente como si fuera el primero. Ahora ganamos el cuarto scudetto y veía un video en el que estaban mi papá y él celebrando y tuve sentimientos encontrados de alegría y tristeza”.

Vignati aseguró que el legado como jugador de Maradona no será igualado por otros futbolistas y lo demuestra que la gente lo sigue idolatrando después de muerto.

“Las generaciones como Messi o Cristiano, jamás van a ser como él, porque también importa que te recuerden muchos años después. No hay comparación posible. Maradona jugaba con compañeros que no eran estrellas y los hacía campeones, no al contrario. Cuando hizo la historia con nosotros, jugaba con jugadores discretos. Además, él solo ganó un Mundial”.

El legado de Massimo con el Museo, va más allá de dar a conocer las pertenencias que tiene. Desde hace 30 años tiene una fundación con la que ayudan a los niños. Hace un mes, compraron un caballo terapéutico para los niños autistas.

“Ayudamos a los niños de un hospital cercano, que tiene leucemia y tumores. Viajo por Italia para hablar de Diego como persona y esto era él. Hizo mucho bien, te lo puedo asegurar, comenzando por mi familia”.

UNO MÁS DE LA FAMILIA

La relación de la familia Vignati con Diego, fue estrechamente familiar. Su hermana, fue la niñera de Dalma y Giannina, sus dos primeras hijas. Massimo tiene dos hijos y, como era previsible, llevan dos nombres especiales: uno se llama Saverio, como su padre y, el otro, Diego, como el campeón del mundo en 1986.

Vignati contó emocionado, que Maradona tuvo oportunidad de reencontrarse con su madre después de 30 años y la abrazó emocionado, como el primer día. Para él, esas son las cosas que no tienen valor y que recuerda con tanto cariño. La última vez que lo vio fue antes de la pandemia, en un encuentro de fútbol benéfico en Roma.

“Fue bellísimo, porque Maradona lloró al ver a mi mamá y también pasó con Claudia. Dalma y Giannina llaman nonna a mi madre”.

En octubre de 2024 estuvo de visita en Argentina y tuvo la oportunidad de ir a Fiorito, la tierra natal de Maradona y recordó que lo recibieron con muchísimo cariño. Sin embargo, no tuvo esa posibilidad cuando Diego falleció en 2020. Fue imposible viajar por la pandemia.

“La noticia fue muy dura. Lo primero que pensé, fue en ir, pero no pude. Aquí en Napoli, todos lloraban. Desde los más pequeños, hasta los más grandes. La gente sintió que perdió un hijo o un hermano. Yo sentí el mismo dolor que cuando murió mi padre, porque no perdí al Maradona jugador, perdí al hermano, al amigo, al consejero. A una persona que tengo en el corazón y hoy todavía me duele”.

Fotos: Cortesía Massimo Vignati.