Derek Jeter renuncia a ser CEO de los Marlins de Miami

Derek Jeter renuncia a los Marlins de Miami

Italo Verde (Caracas).- Este lunes, el CEO de los Marlins de Miami, Derek Jeter emitió un comunicado informándole al equipo, que no seguía como su máximo ejecutivo para la próxima temporada 2022-2023 de las Grandes ligas.

El Miembro del Salón de la fama y leyenda de los Yankees de Nueva York, se encontraba rumbo a su sexto y último año con el conjunto de Miami. El inicio de relaciones de Jeter con los Marlins comenzaría en el año 2017, en el cual fue comprado por un grupo de inversionistas en donde el “Capitán” cuenta con el 4% de las acciones del club.

DECLARACIONES DE DEREK JETER

“Hoy anuncio que los Miami Marlins y yo terminamos oficialmente nuestra relación y ya no seré director ejecutivo ni accionista del club. Hace cinco años tuvimos la visión de cambiar la franquicia de los Marlins, y como director ejecutivo, me enorgullece poner mi nombre y reputación en juego para hacer realidad nuestro plan. A través del trabajo arduo, la confianza y la responsabilidad, transformamos todos los aspectos de la franquicia, remodelando la fuerza laboral y desarrollando un plan estratégico a largo plazo para el éxito.

«Dicho esto, la visión para el futuro de la franquicia es diferente a la que me inscribí para liderar. Ahora es el momento adecuado para que me haga a un lado cuando comience una nueva temporada».

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Con estas declaraciones, los Marlins se quedan sin CEO en medio de las negociaciones entre la MLB y la asociación de jugadores, que buscan un acuerdo para poder comenzar la temporada a tiempo y sin ningún tipo de retraso.

Justamente el dia de hoy, vence el plazo puesto por los dueños de equipos para no cancelar varios de los encuentros de la temporada regular y volviendo a lo que podría ser una nueva temporada recortada como la del 2020.

Los números de Jeter en cuatro temporadas al mando del equipo, fue con record negativo de 218G – 327P, con una sola temporada llegando a postemporada en la campaña 2020. Siendo esta la primera clasificación del equipo desde el año 2003.

Con esta decisión sobre los Marlins, Derek Jeter pudiera contemplar ofertas de otros equipos que se encuentren en la búsqueda de nuevos aires en sus oficinas.

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Los Bravos barrieron la serie ante los Marlins

MLB.- Desde los días de John Smoltz, Greg Maddux y Tom Glavine, Atlanta no había contado con un pitcheo de tanta calidad en los playoffs. Y ni siquiera esos tres futuros miembros del Salón de la Fama llegaron a lanzar como lo han hecho los Bravos en esta postemporada.

«Lo que estos chicos han conseguido en el montículo es una locura», dijo el manager Brian Snitker.

El novato Kyle Wright deslumbró durante seis innings que marcaron su debut en postemporada y los Bravos continuaron con su pitcheo brillante para vencer el jueves 7-0 a los Marlins de Miami, barridos en tres juegos de la serie divisional.

Atlanta reservó así los boletos para la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, a la que no avanzaba desde 2001.

Los Bravos habían perdido ocho series divisionales en forma consecutiva, incluidas las correspondientes a las dos campañas anteriores. Conjuraron el maleficio superando a los Marlins por 18-8 en forma combinada -11-0 en los últimos dos duelos.

En estos playoffs, Atlanta ostenta una foja de 5-0 y una efectividad de 0.92. Ha tolerado apenas cinco carreras en 49 innings.

Se escucharon apenas algunos gritos de emoción cuando los Bravos finiquitaron la serie en un Minute Maid Park prácticamente vacío. Los únicos espectadores a quienes se permitió el ingreso fueron amigos y familiares de los peloteros.

Atlanta se medirá con los Dodgers de Los Ángeles o los Padres de San Diego en la Serie de Campeonato a partir del lunes, en Arlington, Texas.

La última vez que los Bravos disputaron la Serie de Campeonato, militaban en sus filas Chipper Jones, Maddux, Glavine y Smoltz, comandados por el manager Bobby Cox.

Wright (1-0) lució afinado pese a que no lanzaba desde el 25 de septiembre. Toleró tres hits y expidió dos boletos, además de imponer la mejor marca de su carrera con siete ponches.

A.J. Minter, Jacob Webb y Shane Greene finalizaron la faena de cinco inatrapables para que los Bravos propinaran su cuarta blanqueada en cinco juegos de playoffs.

Sólo los Gigantes de Nueva York habrán logrado algo semejante, en 1905, apoyados en Christy Mathewson y Joe McGinnity, integrantes del Salón de la Fama.

Luego de dos rondas de la postemporada, los Bravos han conseguido ya el mayor número de blanqueadas en la historia de la franquicia en playoffs. Superaron a los equipos de 1996 y 1991, que obtuvieron tres y que cayeron en la Serie Mundial.

Están a una blanqueada de igualar el récord de postemporada en las mayores, impuesto por los Indios en 2016, cuando los playoffs implicaron 15 encuentros.

«Es bastante bueno tener tantas blanqueadas. Esto demuestra lo buenos que hemos sido como equipo», dijo Wright, de 25 años.

Los Marlins, quienes perdieron 105 juegos la temporada anterior, protagonizaron una historia alentadora en este año. Se sobrepusieron a un brote de coronavirus que afectó a 18 peloteros tras la primera serie de la temporada, en Filadelfia.

La situación impidió que el equipo jugara durante una semana. Miami llegó a los playoffs, algo que no conseguía desde 2003.

Encabezados por el copropietario Derek Jeter y por el manager Don Mattingly, los Marlins llegaron con confianza a la serie ante los Bravos, tras barrer a los Cachorros de Chicago en la instancia de comodines.

Pero el oven equipo fue anulado por el pitcheo de Atlanta. Perdió una serie de playoffs por primera vez en la historia. Ostentaba una foja de 7-0 en series de postemporada, tras conquistar la Serie Mundial de 1997 y 2003.

«Hemos dado otro paso adelante», dijo Mattingly.

El novato dominicano Sixto Sánchez (0-1) dio la base por bolas a Ronald Acuña Jr. en el comienzo de la tercera entrada. El venezolano se robó la intermedia, avanzó a la antesala en un hit de Freddie Freeman y anotó en otro sencillo del dominicano Marcell Ozuna.

Travis D’Arnaud sacudió un doblete que amplió la ventaja a 3-0. Los Bravos anotaron una más en un elevado de sacrificio de Dansby Swanson.

Sánchez, quien cubrió cinco innings en blanco durante el segundo juego de la serie de comodines, se marchó después de esa entrada. Aceptó cuatro hits y el mismo número de carreras, con tres boletos.

Fue su actuación más corta de la temporada.

Foto: @Braves

Los Bravos a una victoria de llevarse la serie

MLB.- El novato Ian Anderson lanzó con el temple de un veterano, Nick Markakis realizó una estupenda jugada defensiva en el jardín derecho y los Bravos de Atlanta propinaron otra blanqueada en playoffs, al imponerse el miércoles 2-0 sobre los Marlins de Miami.

Los Bravos tomaron así una ventaja de 2-0 en la serie divisional de la Liga Nacional.

Atlanta ha recetado tres blanqueadas en cuatro juegos de esta postemporada. Travis d’Arnaud y Dansby Swanson aportaron sendos jonrones por segunda jornada consecutiva y los Bravos se colocaron a una vic  toria de barrer la serie.

Anderson, de 22 años, permitió tres hits esparcidos en cinco innings y dos tercios, durante los que repartió ocho ponches. El espigado derecho, quien debutó en las mayores recién a finales de agosto, mejoró la salida impresionante que había brindado la semana anterior en la serie de comodín, cuando abanicó a nueve durante seis entradas en blanco ante Cincinnati.

Markakis, de 36 años, ayudó a preservar la blanqueada y la ventaja en el octavo inning.

Corey Dickerson se embasó gracias a un error de Swanson en el campocorto durante el comienzo del episodio, lo que dejó lista la escena para la jugada en que Markakis se lanzó de cabeza. Jon Berti conectó un elevado por la raya, pero Markakis estuvo alerta y capturó la pelota que rebotó una vez. Luego lanzó hacia Swanson para el out forzado en segunda, en una acción apretada.

Foto: AJC.com

Los Bravos vinieron desde atrás ante los Marlins

MLB.- Ronald Acuña Jr. hizo historia al inaugurar el primer inning con un jonrón. Pero hizo falta mucho más para que los Bravos comenzaran con buen pie su serie divisional de la Liga Nacional ante Miami.

Por ejemplo, apareció un pelotazo más contra el venezolano por parte de los Marlins, esta vez a la cadera izquierda con una recta del dominicano Sandy Alcántara. Ese golpe hizo que Atlanta se encendiera y emprendiera la remontada.

Travis D’Arnaud quebró el empate mediante un cuadrangular en un gran ataque durante la séptima entrada y los Bravos vencieron el martes 9-5 a los Marlins, para tomar ventaja de 1-0 en la serie.

«Sí pienso que eso nos despertó», dijo D’Arnaud acerca del pelotazo a Acuña. «Y aprovechamos ese impulso».

D’Arnaud aportó además un doble y un sencillo, para totalizar cuatro remolcadas. Dansby Swanson disparó un cuadrangular como parte del racimo de seis carreras de Atlanta en el séptimo episodio.

Luego de pintar de blanco a Cincinnati a lo largo de 22 innings para imponerse por barrida de 2-0 en la serie de comodín, los Bravos debieron apostar a su bateo en el duelo que puso en marcha la contienda ante los Marlins.

El segundo duelo de la serie, a un máximo de cinco, se realizará este miércoles, también en Houston.

Acuña produjo la carrera inicial de Atlanta, al conseguir su jonrón en la parte baja de la primera entrada. Encontró el segundo lanzamiento de Alcántara y se voló la barda entre el jardín derecho y el central.

Se quedó mirando la esférica por un momento, antes de lanzar el bate, que describió un giro, y de recorrer las bases.

Con ello, se convirtió en el pelotero más joven de la historia de la postemporada en batear un jonrón en el primer turno de su equipo, a los 22 años y 293 días.

Los ánimos se calentaron en el tercer episodio, cuando Acuña fue alcanzado por una recta a 98 mph. El extrovertido jardinero se aferró al tolete y dio unos pasos hacia el montículo, antes de ser rodeado por los umpires y los coaches de los Bravos, quienes lo alejaron de Alcántara.

El dominicano había comenzado a caminar también hacia Acuña.

Luego de una breve interrupción en la que hubo muchos gritos desde ambas casetas, Acuña ocupó la almohadilla. Los umpires hicieron una advertencia a ambos clubes.

En 2018, cuando Acuña era un novato y estaba en una tremenda racha de cuadrangulares, otro dominicano, José Ureña, lo impactó con una recta que constituyó su primer pitcheo en el encuentro.

Al paso de los años, el venezolano se ha convertido en blanco favorito de los pelotazos de los Marlins.

«Miré hacia su banca y dije: ‘Hasta ahora llevan cinco veces'», relató Acuña. «En este momento pienso que hasta me he acostumbrado».

Los Bravos perdían por 4-3 en el séptimo capítulo, antes de que Austin Riley y Acuña batearan sencillos consecutivos sin out para poner fin a la faena del abridor Alcántara.

Otro quisqueyano, Yimi García, llegó al montículo. Freddie Freeman bateó una roleta que derivó en un out forzado y dejó hombres en las esquinas.

El dominicano Marcell Ozuna pegó a continuación una línea de sencillo que empató el encuentro.

D’Arnaud, en su primera temporada con Atlanta, encontró un slider y catapultó la pelota por encima de la cerca del jardín central. El garrotazo de tres carreras colocó la pizarra 7-4.

El júbilo estalló en el dugout de Atlanta. Acuña saltó incluso la valla para festejar.

Foto: MLB

Pablo López lució en el regreso de los Marlins

Luis Alvarado De Sousa (Caracas).- Pablo López volvió hérmético desde la lomita ante los Orioles de Baltimore, en el regreso de los Marlins a los terreno de juego, luego del brote de Covid-19 en el equipo de Miami. Camden Yards fue el escenario de la primera victoria del venezolano en la campaña, un lauro especialmente emotivo luego del reciente fallecimiento de su padre.

López trabajó por cinco episodios en los que no permitió carreras, solo otorgó dos hits y ponchó a siete bateadores de Baltimore. El zuliano lanzó 43 de sus 61 pitcheos en strike y mantiene inmaculada su efectividad. Se espera que su próxima salida sea ante los Mets de Nueva York, el próximo domingo.

Foto: Archivo

Miguel Cabrera, el niño maravilla de Maracay

Tony Cittadino (Mallorca).- Quizás José Miguel Cabrera Torres nunca se imaginó en su infancia que sería uno de los mejores referentes ofensivos en el beisbol de las Grandes Ligas. Tampoco que a su corta edad, estaría perfilado a romper todas las marcas de poderosos peloteros venezolanos en las mayores.

Su habilidad con el bate y su versatilidad con el guante, lo convirtieron en una valiosa pieza del beisbol mundial, pero para llegar a ello tuvo que atravesar un largo camino de sacrificios, como seguramente miles de niños lo han hecho y que, ahora, lo tienen como modelo de superación.

En un trabajo publicado por TalCual en el año 2003 bajo la firma de Pedro Pablo Peñaloza, se descubre al pelotero como ser humano. Ese muchacho que como cualquier otro creció en la pobreza y jugando beisbol en un estadio de la comunidad. Como inspiración siempre tuvo a su madre Gregoria, quien jugó softbol como campocorto durante 14 años con el equipo femenino de Venezuela y a su padre Miguel.

El slugger nació el 18 de abril de 1983 en el Hospital Central de Maracay y su infancia transcurrió entre un bate y una pelota en el barrio La Pedrera. Detrás de la casa de su abuela Berta, había un estadio en el que muchas veces entró saltando la pared y donde hizo emocionar a cada scout que lo visitó.

Tenía la capacidad de poner la pelota donde quería. De niño fue fanático de los Leones del Caracas y a los cuatro años, ya había ingresado a la escuela de beisbol David Torres, jugando su primer partido como segunda base.

Sin embargo, Cabrera se asustó cuando vio que a un compañero le pegaron un pelotazo cuando fue a tomar su turno al bate, motivo por el cual se alejó del juego de pelota y lloraba cada vez que debía ir a las prácticas. Un año más tarde superó el miedo y volvió a los campos, donde se mantuvo en pre junior dentro de la liga Mario Briceño Iragorry.

Luego vio acción con el equipo Fanametal en Cagua y con el Tigritos, club que fue dirigido por el scout de los Rojos de Cincinnati, Félix Delgado. El talento de “Miguelito” hizo pensar en algún momento a sus familiares que los podría ayudar a salir de la situación crítica en que vivían.

Su padre trabajaba en un taller de latonería y pintura y su madre era ama de casa y ayudaba en las cuestiones de negocios familiares. La señora Gregoria indicó: “Su crianza fue un poco dura, con humildad. No exigía nada, porque comprendía la situación que atravesábamos”. En su infancia acostumbraba a jugar básquet, futbolito y junto con sus primos le gustaba visitar parques, disfrutar en las parrillas y bañarse en la playa.

Vecinos de la zona agregaron que era un buen bailador de merengue, juguetón, callado y modesto. Además sus padres lo acompañaban todos los fines de semana a los juegos de pelota. Contó con buena educación y no solía estar en la calle pasadas las nueve de la noche.

Sin embargo, las veces que lo hacía o estaba en el estadio o en una plaza jugando. Cabrera decidió tomar el camino de pelotero profesional a los 13 años. Al salir a la una de la tarde del Liceo Andrés Bello (donde luego se graduó) iba a su casa, almorzaba y luego practicaba beisbol hasta las seis de la tarde.

Ese transitar no fue fácil. Para cuidarle el brazo, su padre le prohibió jugar voleibol en el liceo, aunque él practicaba a escondidas. Era tan bueno, que hasta le habían pedido que integrara la selección nacional juvenil.

La llegada al Big Show

Poco a poco fue creciendo como pelotero y los diversos logros lo llevaron a jugar un torneo en 1997 en Estados Unidos. En ese evento se destacó, al punto de quedar campeón en los departamentos de average, jonrones, campocorto, slugger e infielder.

El talento de Cabrera fue tan notorio, que a diario los scouts visitaban La Pedrera para firmarlo. Su madre comentó que hubo noches en que no dormían estudiando las ofertas de las diversas organizaciones del beisbol del norte, pues a pesar de pensar en el dinero, siempre tuvieron más en cuenta su desarrollo como pelotero.

Sin embargo se decidieron y el 2 de julio de 1999 firmó un contrato con los Marlins de Florida (hoy Marlins de Miami) por un bono de 1 millón 800 mil dólares. Al día siguiente de la negociación, los periodistas arribaron a La Pedrera para entrevistarlo y Cabrera los recibió en shorts, descalzo y sumergido en una montaña de arena, junto al palo de almendrón del patio de la casa de la abuela.

De ahí en adelante, ha escrito muchísimas páginas de oro en su exitosa carrera. Por ejemplo, con los Marlins fue campeón de la Serie Mundial en 2003 y fue a cuatro Juegos de Estrellas (2004, 2005, 2006 y 2007) y ganó dos Bate de Plata (2005 y 2006).

Su número 24 lo ha hecho tanto o más famoso que el pelotero que le sirvió de inspiración para tomar ese dígito: el dominicano Manny Ramírez, a pesar de que es reconocida su admiración por “El Rey” David Concepción.

En el año 2008, firmó un súper contrato con los Tigres de Detroit, organización con la que ha vivido sus mejores campañas en las mayores. Luego firmó una extensión de contrato por ocho años y 153,3 millones de dólares, cifra que lo convirtió en el pelotero mejor pagado en la historia de los Tigres, en el venezolano mejor pagado en las mayores y el cuarto jugador con un contrato tan jugoso en las Grandes Ligas.

Su transitar con los felinos le llevó en 2012 a ganar la Triple Corona, al liderar los departamentos ofensivos de promedio (.330), jonrones (44) y carreras impulsadas. Fue el primer jugador en las Grandes Ligas, al lograr la hazaña desde que Carl Yastrzemski lo hizo con los Medias Rojas de Boston en 1967.

De igual forma, logró dos títulos de bateo más. Uno en 2011 (.344) y el otro en 2013 (.348).

Además en 2012 fue electo como Jugador Más Valioso de la Liga Americana y repitió el galardón en 2013. También estuvo en siete juegos de Estrellas con el nuevo circuito (2010, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015 y 2016) y se llevó cinco Bate de Plata con los felinos (2010, 2012, 2013, 2015 y 2016).

Aunque los tiempos han cambiado y las lesiones han mermado su rendimiento, Cabrera todavía se mantiene en la élite del beisbol, logrando hazañas y números que le allanen el camino a su futura elección al Salón de la Fama de Cooperstown.

Nota: Este trabajo fue publicado en el diario TalCual en la edición especial del año 2007..

Miguel Rojas pidió a sus compañeros aprender del robo de señas

Miguel Rojas

Yelimar Requena.- El venezolano Miguel Rojas se pronunció respecto el robo de señas y pidió a sus compañeros pasar la página e insistió en que esto debe ser un aprendizaje para los peloteros en general.

“No estoy de acuerdo con lo que ellos hicieron, pero ya no podemos hacer nada. Ya MLB tomó cartas en el asunto, lo que puedo decir es que todos podemos aprender de esto», aseguró en unas declaraciones que se viralizaron este miércoles a través de las redes sociales.

A juicio este escándalo debe servir para que los peloteros sepan que no basta con estar en desacuerdo, ante cualquier hecho irregular deben hablar e intentar evitar daños mayores.

«Ahora la cosa es ¿qué puedes hacer tu si eso te llega a pasar en algún momento?… Si ocurre algo así en nuestro club house ya tenemos una mejor idea de que podemos alzar voz para pararlo… Eso es lo que he aprendido de todo esto”, sostuvo.

El campocorto de los Marlins se solidarizó con los peloteros que no estaban de acuerdo con la trampa, pero no se atrevieron a confrontar a sus compañeros.

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Jesús Aguilar ganó su caso de arbitraje salarial

Aguilar

Las Mayores.- El primera base de los Marlins de Miami, Jesús Aguilar, ganó este miércoles el arbitraje salarial y obtuvo un incremento de 637.500 dólares para este 2020.

El criollo cobrará un total de 2.575.000 dólares gracias a la decisión del jurado conformado por Jeanne Charles, Steven Wolf y Edna Francis.

Ahora, Aguilar, que bateo .236 con 12 jonrones en la contienda anterior, debe intentar reencontrarse con el toletero de 2018 que fue incluso convocado al Juego de las Estrellas.

El inicialista dividió su año entre Milwaukee y Tampa Bay, que lo adquirió el 31 de julio a cambio del lanzador Jake Faria y posteriormente lo colaron en asignación a finales de año.

Aparecieron entonces los Marlins para ofrecerle una segunda oportunidad.

Este mismo miércoles el infielder de Houston, Aledmys Díaz, y el jardinero de los Angelinos, Brian Goodwin, también ganaron sus casos de arbitraje para poner la pizarra 6-4 a favor de los equipos.

Está pendiente el caso del lanzador Archie Bradley, que fue presentado el martes.

El receptor J.T. Realmuto y el relevista dominicano Héctor Neris, ambos de Filadelfia, tienen sus audiencias programadas para esta semana..