Euro 2024: Italia contra España, un clásico europeo de alto voltaje

Tony Cittadino (Madrid).- Italia y España son dos de las selecciones más ganadoras en Europa y protagonistas del fútbol mundial. Por sus oncenas han pasado jugadores históricos, que han regalado emociones y partidos vibrantes y, este jueves, se medirán en la fase de grupos de la Eurocopa Alemania 2024.

Cada enfrentamiento es una batalla a sangre y fuego, que no decepciona y que se ha vivido con mayor intensidad en este siglo. Claro está, sin olvidar el electrizante choque de hace 30 años, cuando Italia ganó dos goles por uno en los cuartos de final del Mundial 1994, en el recordado encuentro en el que marcó Roberto Baggio y Luis Enrique sufrió el codazo de Mauro Tassotti.

La serie de por vida favorece a España con balance de 13 victorias, por 11 de Italia y 11 empates. La Azzurra ha anotado 46 goles y la Roja uno menos.

Sin embargo, en este siglo se han enfrentado, mayormente, en la Eurocopa. El encuentro de este jueves, será el quinto consecutivo en el torneo europeo, luego de las ediciones de 2008, 2012, 2016 y 2020.

En este lapso, incluyendo amistosos, partidos de eliminatoria al Mundial y duelos de Final Four de la Nations League, el balance es de siete victorias para España, dos triunfos para Italia y siete empates, de los cuales tres de ellos terminaron en penales y dos los ganaron los transalpinos.

Duelos en la Euro

El recorrido por la Euro en este siglo comenzó en los cuartos de final de la edición de 2008, aunque habían jugado en la fase de grupos de 1980 (Italia 0-0 España) y en 1988 (Italia 1-0 España, Vialli 73’).

Italia llegaba como el actual campeón mundial e igualaron sin goles en 120 minutos. España se impuso 4-2 en los penales, rompiendo la maldición de no pasar de esa ronda.

Fue el inicio de una etapa dorada, en la que lograron imponerse en la final a Alemania para ganar su segunda Euro, luego de la de 1964. Dos años más tarde, se coronaron por primera vez en Sudáfrica 2010.

Los transalpinos y los ibéricos se vieron las caras en par de ocasiones en 2012. La primera, fue en la fase de grupos y el juego quedó igualado a un gol, con tantos de Antonio Di Natale (61’) y Cesc Fábregas (65’).

Luego, en la final en Kiev, los dirigidos por Vicente Del Bosque, lograron un triunfo histórico de 4-0 ante los italianos, con goles de David Silva (14′), Jordi Alba (41′), Fernando Torres (84′) y Juan Mata (88′). De esta forma, la Roja ganó su tercera Euro y alcanzó un triplete histórico, al sumar Euro, Mundial y Euro.

Italia tomó venganza cuatro años más tarde. La oncena de Antonio Conte derrotó a España dos goles por cero, en los octavos de final de la Euro 2016. Giorgio Chiellini (33’) y Graziano Pellè (90+1’), firmaron el lauro azzurro.

El siguiente enfrentamiento fue en las semifinales de la Euro 2020 e Italia volvió a sonreír. Empataron a un tanto en 120 minutos, tras las dianas de Federico Chiesa (60’) y Álvaro Morata (80’), y se impusieron en penales 4-2, con el gol decisivo de Jorginho.

La oncena de Roberto Mancini se enfrentó a Inglaterra en la final y se llevó el título, en una dramática definición en penales. Así lograron su segunda Eurocopa, tras alzarla en 1968.

Otros enfrentamientos

España e Italia también se vieron las caras en la semifinal de la Copa Confederaciones Brasil 2013. Fue un duelo atractivo en Fortaleza, pero empataron sin goles en 120. España se llevó la victoria en penales 7-6, gracias al fallo de Leonardo Bonucci.

Los ibéricos también sacaron buena tajada en las eliminatorias al Mundial Rusia 2018, el empatar a un gol en el Juventus Stadium a un tanto (Vitolo 55’ y De Rossi 82’) y lograr una categórica victoria de tres por cero, en una estupenda exhibición de Isco, quien anotó dos tantos (13’ y 40’). Morata se encargó de cerrar el resultado (77’).

España clasificó como primera de grupo a Rusia, mientras que Italia quedó eliminada en el repechaje ante Suecia y faltó a su primera Copa del Mundo de 1958. La tragedia italiana de repitió en 2022 ante Macedonia del Norte, en el repechaje rumbo a Qatar 2022.

Nations League

La emoción de estos clásicos no quedó allí, pues ambas oncenas volvieron a medirse en el Final Four de la Nations League y España salió airosa en ambas ocasiones.

La primera fue en la edición de 2021. Se enfrentaron en la semifinal en el estadio San Siro de Milano y España ganó 2-1. Ferrán Torres firmó la victoria con dianas al 17’ y al 45+2’, mientras que Lorenzo Pellegrini descontó al 83.

El resultado, además de eliminar a Italia, cortó la racha de 37 partidos invictos ((28JG, 9JE) que, hasta la fecha, se mantiene como la más larga entre las selecciones.

Italia no perdía desde hace 93 años y acumulaba 28 partidos invicta en San Siro. Tenía 61 partidos oficiales en casa sin perder, sin contar los amistosos, con 46 victorias y 13 empates. La última derrota había sido el 8 de septiembre de 1999, al caer 2-3 ante Dinamarca en Napoli, en partido de eliminatorias para la Euro 2000.

España terminó avanzando a la final, pero cayó ante Francia. Los galos triunfaron dos por uno, al remontar con tantos  de Karim Benzema y Kylian Mbappé.

Dos años más tarde, jugaron en Enschede y España se impuso con idéntico marcador. Para entonces, marcaron Jeremy Pino (3’) y Joselu (88’). Por Italia, Ciro Immobile descontó de penal al 11’.

La Roja terminó ganando el torneo, al derrotar a Croacia. Igualaron sin goles y en penales se impusieron 5-4, con un tanto de Dani Carvajal.

De esta forma, los dirigidos por Luis de la Fuente ganaron su primer título internacional desde la Euro 2012 y se unieron a Portugal (2019) y Francia (2021), como los monarcas de la Nations League.

 

El sueño de Portugal se hizo realidad

Luis Alvarado De Sousa (Caracas).- La primera vez que tu equipo favorito gana una copa, es especial. ¿Pero la primera vez que tu selección gana una copa? Eso es un sueño. Vivimos y sufrimos con la selección portuguesa, desde esa primera final de la Eurocopa en 2004. Esa final que perdimos en Lisboa, en el Estádio da Luz contra Grecia. La generación de oro del fútbol portugués, con ídolos como Figo, Pauleta, Maniche, y Rui Costa que nunca pudieron ganar una copa.  Si, la historia de la Seleção  de Portugal siempre quedaba en el “casi”. Pero en esta final no fue así.

La Eurocopa 2016, en Francia no empezaba bien. Tres empates en la primera ronda, “casi” nos elimina Islandia. Nadie creía en esta selección, ni los propios portugueses. Pero tú nunca dejas de confiar en ellos, sigues creyendo que pueden lograr el milagro, porque eso es lo que se iba a necesitar. Con el paso de las fases,  te das cuenta que superaron a Croacia, Polonia, Gales y están en la final de Saint Denis, como 12 años antes en Lisboa. Ya sin la generación de oro, cuyo único sobreviviente es Cristiano.

Crees que al fin va a terminar la maldición del “casi”. Pero el rival es Francia, dueño de casa. Inmediatamente te viene al recuerdo esa semifinal de 2006 con el penal de Zidane, que nos costó la eliminación. Pero confías en la defensa de Pepe, las manos milagrosas de Patricio y algún chispazo del “Capitão” en el ataque.

Ya va a comenzar el juego, buscas tu cábala, ver el juego en Meridiano, porque en DIRECTV son argentinos y empavan. Te pones tu gorraverde e vermelha que te ha acompañado desde Alemania 2006. Los franceses meten mucho miedo, tu mamá no quiere ver el juego, le da demasiados nervios. Suena primero “La Marsellesa” y el estadio se cae. Pero “A Portuguesa” también retumba, hay una colonia rojiverde en las gradas del Stade de France. No estamos tan solos en esta pelea.

Comienza la batalla en Saint-Denis

Los franceses salen envalentonados a llevarse por el medio a Portugal y a Cristiano. Apenas nueve minutos y Payet le hace una falta que el árbitro ni pita como falta. “Deberían botarlo, esa falta es criminal” gritas, pero no pasa nada. Ronaldo se levanta y no puede apoyar la pierna, mira al banco y Fernando Santos le pregunta que si tiene que salir. Él quiere quedarse en cancha, pero no puedo caminar. Mientras tanto, Sissoko es un dolor de cabeza para Pepe y Fonte. Le deja un centro a Griezmann que remata y Rui Patricio saca del ángulo. Respiras con mucho alivio. Nani tuvo una oportunidad al contragolpe y la manda al estadio del PSG.

Sigue el partido, pero tú sigues viendo a Cristiano. No camina, hasta que llega el momento que más temes. Ronaldo se para, se lanza a la grama y comienza a llorar. No puedes creer lo que está pasando, 12 años y tanto esfuerzo para llegar a la final y los franceses le rompen la rodilla al “Capitão”. También se te salen dos lágrimas.

Sale en camilla CR7 y entra Quaresma. Tú sigues creyendo en la selección, pero si ganan va a ser totalmente épico. Portugal se va asentando en la cancha y se defiende bien de la marea francesa. Termina el primer tiempo y crees que pueden aguantar hasta los penales.  Comienza la segunda parte y siguen bombardeando el área de Portugal. Al minuto 78, Giroud tuvo una y “San Patricio” la sacó milagrosamente. Dos minutos después, Nani exige a Lloris, Quaresma intenta una chilena luego del rebote pero el arquero francés vuelve a tapar. Eso te da esperanzas.

Un cambio al minuto 79 no parecía nada de otro mundo. Entraba Éder, el mueble de la selección y último recurso, salía la joven promesa de Portugal: Renato Sanches. Esto sería decisivo más adelante.

Francia sigue dominando, sufres como nunca en la vida.  En el minuto 91, Gignac recibe un balón desde la banda y se libra de Pepe con un regate. Sale Rui Patricio a achicar porque Fonte nunca llega. Se para el tiempo, Gignac remata y el balón va poco a poco hacia el arco. Sabes que fue gol, se acabó el sueño. Ya imaginas los memes en Facebook contra la “Seleção”. Pero por alguna razón, el balón se estrelló en el poste. Esto sí que no lo puedes creer, es un milagro. No fue gol, la Virgen de Fátima está con ellos. Logran despejar el balón y terminan los primeros noventa minutos. Recuerdas la final de Argentina 78’, el holandés Nanninga le dio al poste de igual manera que Gignac, pero Argentina ganó esa final a pesar de eso, ¿Sería una señal?

Media hora más de angustia

En el tiempo extra, Portugal fue mejorando a medida que pasaba el tiempo. Francia estaba extenuada por el esfuerzo. Primero Pepe de cabeza, pasó cerca del poste. Luego Éder, casi logra anotar de cabeza pero los franceses sacaron en la línea. Después Guerreiro, de tiro libre lo mandó al poste, ¿Cómo se puede tener tan mala suerte pana? gritamos.

Pero al minuto 109 llegaría la más grande sorpresa de mi vida. Moutinho robó un balón en el medio campo y se lo dio a Éder, que se quitó a Umtiti con las manos y a Koscielny con el cuerpo. Estaba solo frente a la media luna, ¿Quién piensa que este mueble, como le decían los medios portugueses, podía rematar desde ahí?

Pero eso fue lo que hizo, remató espectacularmente desde la frontal de la media luna a la base de la meta francesa. Lloris se estiró pero nada podía hacer. Golazo de Éder. No creía el gol hasta que vi a la grada portuguesa brincar detrás del arco francés. Salí corriendo a abrazar a mi mamá que seguía sin ver el partido, era increíble, impensado, pero real.

Éder, un bisau-guineano nacionalizado portugués, marcó un golazo para ser recordado por siempre. Un gol para convertirse en héroe, uno de esos héroes del mar que dice nuestro himno. “Uma chuva de luva branca cayó sobre París mientras Cristiano gritaba desaforado en el banco de suplentes.

Francia estaba rabiosa, buscaba la igualdad, pero nadie nos podía quitar esta victoria. Un último despeje de Rui Patricio al medio campo y pitó el árbitro. Ganamos la final, a Francia, en París. Ni en nuestros mejores sueños lo habíamos imaginado. Gritamos al aire hasta quedarnos sin aliento, se acabó el “casi”, por fin ganamos la Eurocopa, se despejaron los fantasmas de 2004. El último sobreviviente de la generación de oro levantó la copa, Cristiano con la rodilla vendada, el “Capitão”. Eramos por fin, campeones de Europa, nadie nos iba a quitar el mérito.

El fútbol es sufrimiento, así como alegrías. Este partido se resume en una frase: C’est la vie

Foto cortesía : AS.