Prensa Inter.- El Inter se marcha a casa desde Ucrania con un punto en los bolsillos y con la sensación de haber podido llevarse algo más. El de hoy ha sido un partido igualado que ha acabado en tablas, con un marcador a 0 durante 90 minutos y a pesar del prometedor juego de ataque del Inter. Edin Dzeko lamenta su ocasión perdida, Nicolo Barella lamenta que el travesaño no esté unos centímetros más arriba, y Joaquín Correa y Stefan de Vrij lamentan su mala fortuna por el rechace del veterano Adriy Pyatov, que salvó dos balonazos de milagro para mantener el marcador igualado.
Sencillamente, no había manera de abrir el marcador. Parece que los dioses de los goles no le sonríen al Inter en el Estadio Olímpico de Kiev. Al igual que en la pasada temporada de la Liga de Campeones, el Nerazzurri volverá de Ucrania sin goles en los bolsillos. La historia se repite una vez más, y no es solo en el marcador: el Inter vuelve a golpear el travesaño, frustrando así el hermoso esfuerzo de Barella por marcar; vuelve a toparse contra un muro, esta vez encarnado en un Pyatov con unas manos de herrero.
El guardameta hoy ha interpretado su papel del mismo modo que lo hizo su compañero Anatoliy Trubin, el cual salvó el balón de la misma manera en la pasada temporada. Los hombres de Inzaghi rascan hoy un punto tras dos jornadas europeas sobre las espaldas, pero todavía necesitan encontrar la red. Los próximos cuatro partidos serán clave para la lucha del Inter por seguir en la competición europea de élite. Tendrán que esperarse hasta el 19 de octubre para aprovechar el tercer intento: el partido contra el Sheriff Tiraspol en San Siro.
A la primera parte le faltaba la intensidad que el Inter nos ofreció en su última jornada europea contra el Real Madrid, y también le faltaba la acción y el juego a todo gas del sábado contra el Atalanta. No obstante, la manera en la que hoy se ha desarrollado el partido tampoco es una sorpresa… Roberto De Zerbi se sacó un sistema 4-2-3-1 de la manga, que a veces se convertía en más bien 4-1-4-1. Esta formación bloqueaba los espacios para el Inter y, de este modo, el Shakhtar les presionaba sin cesar en todo el campo, lo que les arrebataba a los delanteros interistas toda su inspiración y creatividad.
Simone Inzaghi, por su parte, optó por un sistema 3-5-2, con cambios notables: Federico Dimarco en la banda izquierda, y Matías Vecino por detrás de la línea ofensiva. El partido requería de un buen planteamiento, de paciencia, de aprovechar las oportunidades, de buscar espacios y de momentos de inspiración.
El juego del Shakhtar se basaba en la elaboración, con movimientos limpios y pases triangulares bien organizados, gracias a los cuales los jugadores ucranianos se encontraban en los espacios y gozaban de cierta superioridad numérica. El primer aviso para la portería de Samir Handanovic fue de Solomon, que disparó desde el área por la izquierda, pero el balón terminó por acabar fuera. La estrategia de De Zerbi se vio frustrada cuando Lassina Traore abandonó el terreno en camilla a los 10 minutos del partido, tras chocarse contra Denzel Dumfries. El Inter aprovechó la oportunidad para disfrutar de más espacios por la banda derecha, pero aún de manera restringida, dada la estricta defensa de los Ucranianos compuesta por un centro del campo con 5 jugadores, lo que no hacía más que generarles quebraderos de cabeza al elenco italiano.
Nicolo Barella intentó aventajar a su equipo, pero su lanzamiento chocó contra el travesaño de la portería, algo que el Nerazzurri ya sufrió la pasada temporada en un intento similar. El Shakhtar atacaba en trombas, lo que obligaba al Inter a arreplegarse. Lautaro Martínez se mostró animado en el ataque, y su compañero, Edin Dzeko, no logró aprovechar bien ninguna de sus ocasiones ante la portería. Ni el local ni el visitante hicieron nada del otro mundo, y así acabó la primera parte, que nos dejó con una sensación de que podía pasar cualquier cosa en cualquier momento.
Tras el descanso, el Shakhtar salió con ganas de matar y durante un tiempo puso al Inter contra las cuerdas. Los jugadores de De Zerbi eran la sombra de los interistas, e incluso generaban ocasiones de peligro con movimientos rápidos de balón y ponían a prueba las debilidades del Nerazzurri. Pero entonces llegó Milan Skriniar para demostrar lo que vale, y con ello, realizó una intervención que le salvó la vida a su equipo en el 49’. El eslovaco también tuvo que gestionar los ataques del Shakhtar, lo que permitió a su equipo adelantarse en el campo y jugar en la otra punta para intentar marcar, hasta llegar a Lautaro y generar una buena ocasión de gol.
El conjunto visitante se hizo con la posesión del balón en gran parte del partido, en un 70%. Su juego se desarrolló de manera gradual, partiendo desde la defensa hasta llegar a la acción en el centro del campo. Pero ahí es donde se topaban con el Hombre del Partido, Skriniar, un guerrero defensivo que no dudaba en rechazar todo lo que se interponía en su camino. Si bien los cambios de Inzaghi fueron una inyección de energía en la línea de ataque Nerazzurri (y siguiendo la misma estrategia que contra Atalanta), finalmente no lograron idear ninguna jugada que cambiara el resultado del partido.
Y así prosiguió el partido hasta el pitido final, y ambos equipos, por el desgaste, perdieron fuelle. No obstante, no podemos pasar por alto las dos sensacionales ocasiones del Inter que asustaron a Pyatov, que se las arregló para mantener al conjunto italiano a raya. El guardameta de 37 años demostró ser todo un campeón en dos ocasiones en la recta final del partido: primero, negándole el intento a Correa; y segundo, rechazando el cabezazo de De Vrij tras el saque de esquina. Dos salvaciones vitales para el Shakhtar, que se ganó a pulso el punto que se lleva hoy. El Inter, por su parte, es la segunda temporada consecutiva que se va de Kiev sin marcar. Este 0-0 se suma al currículum del equipo: ya son 3 empates a 0 de 4 partidos disputados entre ambos equipos.
Ahora el Inter cuenta con un punto tras dos jornadas de Liga de Campeones, con lo cual dispone de 4 intentos más para darle la vuelta a la tabla y de muy poquito margen de error.
Shakhtar Donetsk 0-0 Inter
SHAKHTAR DONETSK (4-2-3-1): 30 Pyatov; 2 Dodo, 5 Marlon, 22 Matviyenko, 31 Ismaily (4 Kryvstov, 78); 7 Maycon, 6 Stepanenko; 38 Pedrinho, 21 Alan Patrick (11 Marlos, 85), 19 Solomon (20 Mudryk, 78); 23 Traore (14 Tete, 11).
Suplentes en banquillo: 81 Trubin, 3 Vitao, 8 Marcos Antonio, 15 Bondarenko, 20 Konoplia, 44 Korniienko, 45 Sikan, 77 Bondar.
Entrenador: Roberto De Zerbi.
INTER (3-5-2): 1 Handanovic; 37 Skriniar, 6 de Vrij, 95 Bastoni; 2 Dumfries, 8 Vecino (5 Gagliardini, 81), 77 Brozovic (20 Calhanoglu, 55), 23 Barella, 32 Dimarco (14 Perisic, 81); 9 Dzeko (19 Correa, 55), 10 Lautaro (7 Sanchez, 72).
Suplentes en banquillo: 21 Cordaz, 97 Radu, 11 Kolarov, 13 Ranocchia, 22 Vidal, 33 D’Ambrosio, 36 Darmian.
Entrenador: Simone Inzaghi.
Amonestados: Dumfries (I)
Otros: Tarjeta amarilla para el entrenador Roberto De Zerbi
Tiempo añadido: 3+2 minutos
Árbitro: Kovacs (ROM).
Asistantes: Marinescu, Artene (ROM).
Cuarto oficial: Chivulete (ROM).
Var: Fritz (GER).
Asistente del VAR: Hategan (ROM)
Foto: Prensa Inter